Termina el Betis Deportivo el derbi ante el Sevilla Atlético con la sensación de que ha dejado escapar una gran oportunidad y no sólo por el penalti fallado por Raúl García justo antes del descanso. Y es que, los de Ruano, que jugaron toda la segunda mitad del encuentro con uno más por la expulsión de Pedro Ortiz, no supieron amortizar esa ventaja. Con todo, los heliopolitanos también tuvieron que ver cómo el balón de Calderón en el último segundo de partido -literal- se estrellaba en la madera.
Regresa el filial verdiblanco de la ciudad deportiva sevillista con un sabor agridulce tras un derbi que se le pudo poner muy de cara al filo del descanso, pero que la buena intervención de Javi Díaz al disparo de Raúl impidió.
Tras una primera parte en la que apenas encontraron los dos equipos la forma de profundizar y hacer daño al rival, se esperaba más de un Betis que en la segunda mitad no encontró a la velocidad de Julio Alonso, muy destacado en la primera mitad, ni la efectividad de sus delanteros.