José Antonio Lara muestra a ESTADIO Deportivo sus comienzos aruncitanos, así como el nivel de ambición y expectativas.
A principios de temporada, ninguno se imaginaba que sus caminos se cruzarían. Un despido inesperado en
Torreblanca y una dinámica negativa en un club deseoso de ascenso provocaron el comienzo de este vínculo. Escasamente un mes llevaba
Lara sin sentarse en un banquillo cuando la entidad rojiblanca decidió ponerse en contacto con él para continuar un proyecto que lleva ya varios años intentándolo sin éxito.
"Fue todo muy rápido. Echaba de menos los entrenamientos, la competición, etc. por lo que en cuanto se me planteó la idea, acepté sin dudarlo", declara.
A sus 43 años y con una idea de juego muy clara basada en el buen trato del balón y llevar la iniciativa, llegaba a una de los clubes más exigentes de la categoría, tanto por presupuesto como por historia.
"Aquí se nota la obligación por ganar siempre y ascender. Pero eso me gusta", dice. "Es cierto que no es sencillo llegar a un equipo hecho, con una plantilla tan corta y con algunos problemas laborales, pero la exigencia tan alta es la que es. También nos están dando todas las facilidades y el ejemplo es las soluciones que nos ofrece el juvenil. Por todo ello, tanto a mi cuerpo técnico como a mí nos atrae el reto, volver a ascender a División de Honor...", añade Lara ambicioso.
El comienzo no ha sido sencillo.
Dos victorias, dos empates y dos derrotas (ante Rociera y Lora, dos rivales directos) en el poco tiempo que lleva al mando. Sin embargo, el técnico sabe que los proyectos se miden a largo plazo y trabaja para mejorar los registros del equipo, especialmente en la faceta defensiva: "Empezamos goleando a La Barrera, pero el resultado fue algo engañoso. Salí con la sensación de que quedaba mucho trabajo por delante. Nuestra idea de juego es ofensiva y tenemos futbolistas de mucha calidad, sin embargo, para ascender hay que ser un equipo fiable atrás también. Los jugadores se tienen que habituar a la presión tras pérdida que queremos. Le hemos metido más intensidad, el trabajo sin balón, correr para recuperarlo... Eso sí, la predisposición es muy buena", considera.
El conjunto moronense no ha salido de los puestos de 'play off' en toda la campaña, situándose actualmente en el cuarto puesto con 45 puntos (solo uno por encima del Bellavista), pero este inesperado parón condiciona su andadura moronera. "Lo primero es la salud. Pero estamos deseando volver al campo. Soy de los que optan por medidas excepcionales y acabar entre junio y julio. Sería lo más justo y lo que menos trastocaría el futuro. Por ello, estamos con un trabajo individualizado para volver lo mejor posible y ascender", concluye.