La
UP Viso es uno de los equipos revelación del G. I de
División de Honor. Es tercero, fruto de un juego coral, seguridad defensiva y un acierto arriba personalizado en
Manuel Salvat.
"Estamos disfrutando mucho. La clave es el compromiso. Tenemos nuestra idea y sabemos a qué jugamos, pero la unión del equipo es muy grande. Somos una familia", manifesta el polivalente atacante, que a sus 22 años pasa por su mejor momento tras superar unos problemas físicos que arrastraba desde su época cadete.
Comenzó a dar sus primeras patadas a los cinco años, y a los ocho ingresó en el
Betis. "Eché buenos años hasta infantiles, pero a los catorce paré debido a problemas en la espalda por el crecimiento. Estuve un año sin jugar y a los quince me cedieron al
Dos Hermanas", recuerda el atacante, que completó su formación en la UP Viso y
Sevilla Este DH Juvenil, fichando por la
UP Viso en su primer año sénior.
Fue uno de los integrantes del histórico ascenso a
División de Honor, pero a los dos años reaparecieron sus peores pesadillas: "Sufrí pubalgia. Me recomendaron un fisio (Manuel Alcantarilla), que dio con la solución. Debido a mi descompesación, me había creado una pubalgia que no era normal a mi edad. Me curó y desde entonces hago un trabajo de fortalecimiento. Me encuentro en mi mejor momento. Disfruta ahora más que de pequeño".
Tanto disfruta
Salvat que ha optado por festejar esta campaña sus goles (cinco, logrados en las últimas seis jornadas) con una celebración especial, siguiendo el camino abierto por
Griezmann y su baile del 'lárgate pringao'. "Soy de
FIFA, pero jugando con mi hermano pequeño al
Fortnite le dije que cuando marcara haría un gesto del juego. Así, cada gol lo celebro haciendo el pico", señala.