Los aficionados del
Extremadura se marcharon con un sabor agridulce la pasada jornada. Tras adelantarse por 2-0 al
Elche y jugar en superioridad por la expulsión de
Manuel Sánchez, acabó sumando un punto (2-2), aunque asistieron al debut de un futbolista que a buen seguro dará que hablar en
Almendralejo:
Álvaro Romero.
El habilidoso extremo, natural de
Alcosa, saltó de la cantera del equipo de su barrio al
Nervión, donde militó nueve campañas, hasta
Liga Nacional Juvenil. Posteriormente, y tras probar sin suerte en el
Betis y en el
Cádiz, se enroló en el
Diocesano, equipo extremeño de
División de Honor Juvenil. Su gran año le permitió dar el salto a sénior, firmando por el
Azuaga (equipo extremeño del Grupo XIV de Tercera) en la 15/16, donde cuajó un excelente ejercicio firmando 20 goles. De ahí, a Segunda B; primero al
Arena y después al
Jumilla y
Badajoz el pasado campeonato.
A sus 22 años se comprometió el pasado verano con el
Extremadura B por dos temporadas. Con el equipo de
Juan Sabas completa cuatro convocatorias, tres en
Liga y una en
Copa ante el
Alcorcón, donde jugó 36 minutos. Su turno en Liga le llegó contra el
Elche, jugando 18 minutos sustituyendo a Chuli.
"Gracias a todos por cada uno de vuestros mensajes , pero no es ni mucho menos el debut soñado. Solo queda trabajar el doble y corregir errores", puso en su cuenta de Twitter, aunque a buen seguro que continuará dando que hablar.