El Castilleja ha sido una de las noticias positivas del fútbol sevillano en la primera vuelta en Tercera. El conjunto dirigido por José Antonio Granja ha acabado lejos del descenso y empatando a uno en su último partido del año en el Nuevo Mirador de Algeciras.
Ahora, disfruta de unas merecidas vacaciones con la mosca detrás de la oreja. El conjunto aljarafeño sufrió en sus carnes cómo el mayor poderío económico de otros conjuntos se llevaban a sus efectivos más destacados, como ocurrió con Gerardo y Lolo, que acabaron firmando por el San Roque de Lepe, una situación que espera que no se repita de nuevo.
Y es que en las filas castillejanas Dani Casado ha encontrado la estabilidad que necesitaba para explotar sus cualidades. Diez goles en una vuelta lo dicen todo.
Sus buenas actuaciones han despertado la atención del resto de la categoría. Pese a que en las oficinas del Antonio Almendro no tienen constancia de ninguna oferta por su atacante, se es consciente de que puede ser tentado. Mientras tanto, el único movimiento seguro es la inscripción del lateral Vázquez, lesionado de gravedad antes del inicio de Liga, y del esperado debut del argentino Emiliano, una vez llegado su tránsfer.