Alejandro Arribas, central del
Deportivo, se ha referido este lunes a la celebración de
Iago Aspas, con el que compartió vestuario en el
Sevilla, en el gol que decidió el derbi gallego de este domingo en el estadio de Riazor (0-1) y ha afirmado que "si a un jugador se le odia en un sitio será por algo".
Tras batir a
Germán Lux al rematar en el área un centro de
Beauvue desde la banda derecha, el jugador del
Celta celebró el gol delante del fondo que ocupan los
Riazor Blues señalando el escudo de su equipo.
"No vi la celebración en el momento y yo estaba molesto porque nos habían metido gol. Cada uno que lo celebre como quiera, allá él. Si a un jugador se le odia en un sitio será por algo.
Aspas y el
Dépor no tienen mucho en común, entonces ni a uno ni a otro le hará gracia lo que le pasa al contrario. Esto es fútbol y a veces te toca vivirlo en contra y otras veces a favor", indicó
Arribas.
En rueda de prensa, el central aseguró que el derbi era "un partido para un empate, con una ocasión para cada equipo", un mano a mano de
Celso Borges con
Sergio Álvarez en el arranque del segundo periodo y la que remató
Aspas cuando el partido entraba en la recta final.
"Fue una pena no poder brindarle un punto a la afición, porque fue un partido para empate, un partido cerrado, con una ocasión para ellos y otra para nosotros. La más clara fue la nuestra, pero ellos la metieron y nosotros no acertamos. Fue un partido muy físico. El equipo intentó ir hacia arriba, pero no en todos los partidos se consigue esa brillantez", comentó.
A pesar de haber perdido los dos partidos oficiales ante el
Celta esta temporada y un amistoso en verano,
Arribas indicó que el equipo vigués no es tan superior al
Deportivo como reflejan los resultados.
"Nosotros veníamos bastante mejor que ellos en LaLiga, pero el año pasado nos tocó a nosotros ganar los dos partidos y este año les ha tocado a ellos. En la primera vuelta (4-1) fueron más superiores, pero ayer no, tuvimos una ocasión cada equipo y era un partido de empate", incidió.
Arribas advirtió de que "ni mucho menos" la derrota debe afectar al
Deportivo porque el equipo "estuvo bien" y "la dinámica sigue siendo buena".
"Estamos a tres partidos del descenso (seis puntos más el golaverage con el
Sporting) y a la vuelta vienen tres partidos seguidos y ahí veremos si conseguimos salir o tenemos que seguir peleando por no bajar", declaró.
Con todo, admitió que la afición "está dolida porque era un partido especial para todos, para la afición, para el club".
"Si ganábamos nos poníamos a cuatro partidos de la zona de descenso y casi con un pie y medio salvados, pero bueno, tampoco nadie confiaba contra el
Barça y lo sacamos. Este equipo siempre pelea todos los partidos y tiene opciones", concluyó.