El
Deportivo Alavés ha confirmado este viernes que ha solicitado oficialmente a la sociedad San Mamés Berria la disputa en San Mamés de la
final de la Copa del Rey que medirá el 27 de mayo al club vitoriano contra el
FC Barcelona, una petición que han realizado a su vez a la
Real Federación Española de Fútbol (RFEF).
Como avanzó el presidente del Grupo Baskonia-Alavés tras el pase a la final del 'Glorioso', el Alavés ha solicitado a San Mamés Berria, entidad participada por el Gobierno Vasco, Diputación Foral de Bizkaia, Ayuntamiento de Bilbao, Kutxabank y Athletic Club, que su a vez inste a la Real Federación Española de Fútbol a la celebración de la final en la nueva 'Catedral'.
"Es nuestro deseo celebrarla en Bilbao por diferentes razones, entre las que destaca principalmente, las facilidades que supone para la afición alavesista por su cercanía, en detrimento de otras ciudades a mayor distancia de Vitoria", señaló el club en un comunicado.
Además, aseguran que la llegada de
casi 50.000 aficionados procedentes de ambos clubes supondrá un impacto económico muy importante de alrededor de 10 millones de euros según informes de instituciones públicas basados en finales anteriores para Euskadi. "Y como punto importante, la sociedad San Mamés Berria ingresaría, por cuestiones de arrendamiento del estadio, una cantidad superior al millón de euros", señalan.
El club ha mantenido conversaciones con el director general del Athletic Club,
Jon Berasategui, para transmitirle el deseo por parte del Deportivo Alavés de celebrar una cita deportiva de tal envergadura en su estadio. Además, ha tratado de tener comunicación con el presidente del Athletic Club,
Josu Urrutia, "sin resultado positivo hasta el momento", y ha establecido los primeros contactos con el presidente de la RFEF,
Ángel María Villar.
"La entidad albiazul se pone a disposición de la sociedad San Mamés Berria para analizar todas las posibilidades de la disputa de la Final en San Mamés y, de esta manera, lograr un beneficio muy importante tanto para la afición alavesista como para Euskadi por las consecuencias económicas de la celebración del partido", concluye el Alavés.