Zinedine Zidane, técnico del
Real Madrid, ha marcado las bases para la recuperación inmediata del vestuario de su equipo tras pasar de una racha histórica a dos derrotas consecutivas, con el trabajo con mayor intensidad y la serenidad como puntos claves para recuperar la confianza perdida.
El
trabajo psicológico de Zidane con sus jugadores comenzó en la noche del miércoles tras encajar ante el
Celta de Vigo la segunda
derrota consecutiva, igualando en 2017 todas las que encajó en el pasado año.
Acusando aún el golpe moral de ser remontado en el
Sánchez Pizjuán por el
Sevilla, el Real Madrid dejó las peores sensaciones de la temporada en el
Santiago Bernabéu ante el Celta de Vigo. Tras analizar el partido al detalle, Zidane apelará a mostrarse con mayor intensidad en el terreno de juego en cada partido y pedirá serenidad a sus jugadores, inmersos en el primer bache de la temporada.
"Les voy a decir que hay que seguir trabajando como hasta ahora porque lo habíamos hecho muy bien", señaló Zidane apelando en primer lugar al trabajo diario de entrenamientos.
"Hay que calmarse y estar serenos", añadió entrando en el factor psicológico, que es donde piensa el técnico francés que está el problema ya que el físico defiende una buena preparación de todos. "El grupo no está tocado, nos fastidiaron la derrotas pero hay que meter mucha más intensidad y energía. Es lo que nos va a hacer salir de esta pequeña decepción".
Son las claves de Zidane que desde el jueves transmite a sus jugadores para no entrar en una crisis que afecte a la buena línea de la temporada. No hay días para lamentaciones de los futbolistas del Real Madrid que el sábado pueden arreglar errores ante el
Málaga de nuevo en el Bernabéu, antes de buscar una remontada histórica en
Copa del Rey (nunca levantó un 1-2 en contra), o dirá adiós al primer título de los que opta.