Un hincha del
Sporting de Portugal murió esta madrugada atropellado junto al estadio del
Benfica, en Lisboa, apenas horas antes de que ambos equipos se enfrenten en un partido que ha sido catalogado como de "alto riesgo" por la Policía.
El fallecido es un hombre de nacionalidad italiana, de 41 años, seguidor del
Fiorentina y también del
Sporting, según informó hoy el club lisboeta en un comunicado en el manifestó su pesar por este "trágico acontecimiento".
Asimismo, los "leones" mostraron su deseo de que las circunstancias del atropello sean esclarecidas por las autoridades y se identifique al conductor, que, según dijeron fuentes policiales a medios lusos, se dio a la fuga.
Según estas informaciones, el suceso se produjo después de que miembros de ambas aficiones se enfrentaran en los alrededores de La Luz.
El presidente del Sporting,
Bruno de Carvalho, identificó posteriormente al fallecido como
Marco Ficini y envió en un mensaje personal sus condolencias a la familia asegurando sentir una "enorme tristeza".
"El día que debía ser de fiesta y de otro gran espectáculo de fútbol queda marcado por la muerte de un hincha del Sporting", sostuvo en un mensaje publicado en Facebook en el que instó a los aficionados de los "leones" a no entonar cánticos ofensivos y tener un "comportamiento digno de la grandeza" del club.
Por su parte, el
Benfica lamentó "de forma vehemente" lo ocurrido en un comunicado y aseguró que "desde primera hora" mantiene una "estrecha colaboración" con las autoridades para ayudar a esclarecer lo ocurrido.
Las "águilas" también reiteraron su llamamiento al "necesario respeto y moderación" entre los hinchas, especialmente de cara al choque de esta noche.
Mientras, la
Liga Portuguesa de Fútbol Profesional (LPFP) expresó en un comunicado su repudio "por cualquier acto de violencia física o verbal que puedan afectar el espectáculo deportivo" y en especial el derbi de hoy, "un momento que exige serenidad y 'fair play'".
El
Sporting-Benfica, que se disputará esta noche con lleno en el estadio de Alvalade, es considerado el clásico de Portugal y llega en un momento clave de la Liga lusa.
El Benfica, líder con 71 puntos, tres más que el Oporto, segundo clasificado, necesita vencer al
Sporting para mantener la distancia de seguridad que tienen sobre los blanquiazules, que están a la espera de un tropiezo de los encarnados para ocupar la primera plaza.
Pero los "leones", terceros con 63 puntos, se niegan a ser simples espectadores en esta pugna y acudirán al terreno de juego a buscar una victoria que les acerque a la segunda plaza, con acceso directo a la Liga de Campeones.
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