El Principado de Mónaco anunció hoy un refuerzo de la seguridad para el partido de vuelta de cuartos de final de la Liga de Campeones que mañana enfrentará a su equipo contra el
Borussia de Dortmund, tras el atentado sufrido por el autobús del equipo germano la semana pasada en la ida.
El director de seguridad pública de Mónaco,
Richard Marangoni, afirmó que aunque el nivel de vigilancia es "bastante elevado" en el Principado, han adoptado "medidas de refuerzo" dado el contexto particular en el que se desarrolla el partido.
Se han desplegado 350 agentes, 200 de ellos antidisturbios cedidos por Francia.
Prestarán una atención particular a la concentración del
Borussia y a su desplazamiento hasta el estadio Luis II, agregó.
Morangoni señaló, sin embargo, que no han recibido indicaciones de que exista una amenaza especial previa sobre el equipo germano.
También se reforzará la seguridad en los accesos al estadio, con dos registros sistemáticos a todos los espectadores, uno en el perímetro de seguridad.
Tanto en las llegadas de vehículos como en el interior del estadio y en la evacuación del mismo, también se incrementará la seguridad.
De los 18.000 espectadores que se espera que mañana llenen las gradas del Luis II, unos 1.500 serán hinchas del
Borussia.
La ida se vio empañada por la explosión de varios artefactos explosivos al paso del autobús del
Dortmund cuando acudía al estadio, lo que provocó heridas al central español del equipo germano
Marc Bartra.
El duelo fue retrasado un día y ganó por 2-3 el equipo monegasco.
Algunos futbolistas del
Borussia y su entrenador manifestaron que el encuentro no debía haberse disputado sólo 24 horas después del atentado y que lo jugaron aún impresionados por el incidente.