El parte médico del
Bayern, de cara al partido contra el
Real Madrid, mezcla algunos informes que deben alegrar al club bávaro -el regreso a los entrenamientos del meta
Manuel Neuer y de
Thomas Müller- con otros que suponen un golpe, como la baja de
Mats Hummels.
Además, hay otros que dejan una sombra de duda, sobre todo en lo que respecta al estado del delantero
Robert Lewandowski.
Del
Bayern suele decirse que todos los jugadores son sustituibles menos dos: Neuer y
Lewandowski.
Lewandowski ni siquiera tiene un suplente natural y la alternativa, en caso de baja, es
Müller, que no es un delantero centro clásico, sino más bien un media punta.
Neuer, con una lesión en el pie derecho que incluso le hizo pasar por el quirófano, fue baja en tres jornadas de la Bundesliga pero ya ha vuelto a los entrenamientos y se ha ejercitado normalmente.
Por consiguiente, a menos que hubiera contratiempos de última hora, hay que contar con él mañana en la portería bávara.
Lewandowski dio un susto tremendo en el partido del sábado contra el
Borussia Dortmund cuando, tras un falta en su contra del meta
Roman Bürki, cayó de forma desafortunada y se golpeó el hombro derecho.
El delantero polaco, tras convertir el penalti que significó el 4-1 para el
Bayern, fue sustituido y se retiró del campo con dolores. Más tarde, hubo un parte de tranquilidad cuando los médicos informaron de que no hay había ninguna rotura y que solo se trataba de una contusión. El propio
Lewandowski anunció que mañana estaría al 100 por 100.
No obstante, un asomo de duda volvió a surgir cuando se conoció que
Lewandowski no había participado en el entrenamiento de ayer a puerta cerrada.
Todo indica que se trató de una medida de precaución pero hay temores de que el golpe siga causando dolores y
Lewandowski tenga que jugar con ellos contra el
Madrid.
La baja de
Hummels, por una distorsión en el tobillo derecho, fue sin duda un golpe para
Carlo Ancelotti, que había dicho que contaba con él y que tendría que decidir quién estaría a su lado en la pareja de centrales.
La alternativa estaba entre
Javi Martínez y
Jerome Boateng, que ahora jugarán juntos, como ya lo hicieron el sábado pasado ante el
Dortmund.
Boateng, por una lesión en los pectorales, estuvo varias semanas alejado de las canchas y, aunque ha tenido un regreso sin problemas, queda la duda de si para un compromiso de la envergadura del de mañana está suficientemente en forma y tendrá el suficiente ritmo de competición.
Un problema adicional es que
Boateng tiene ya dos tarjetas amarillas en la Liga de Campeones, con lo que si fuera amonestado mañana se perdería el partido de vuelta.
En ese caso, y en vista de que todo indica que
Hummels se perderá también el segundo partido contra del
Madrid, Ancelotti tendría que recomponer la defensa recurriendo a
David Alaba o a
Joshua Kimmich como centrales improvisados.
El regreso de
Müller, tras un golpe en el pie derecho que le hizo perderse dos jornadas de la Bundesliga, es sin duda una buena noticia para el
Bayern pero, por el papel que ha tenido el jugador en la actual Liga de Campeones, no es algo necesariamente determinante para mañana.
Müller ha venido jugando en la
Bundesliga pero en la Liga de Campeones ha sido normalmente suplente.
Para darle paso en el equipo, a veces
Ancelotti retrasa la posición de
Thiago Alcántara y prescinde de
Xabi Alonso o
Arturo Vidal pero, para un partido como el de mañana, ese sería probablemente un riesgo demasiado grande en lo defensivo.