El defensa español
Álvaro Domínguez, actualmente en el
Borussia Monchengladbach, ha anunciado su decisión de retirarse del fútbol, con 27 años, a causa de las lesiones.
El zaguero madrileño, que repartió su carrera entre el
Atlético de Madrid y el
Borussia, envió un mensaje en las redes sociales "dirigido a los seguidores del
Borussia Monchengladbach y el
Atlético de Madrid que tanto cariño" le han demostrado "siempre".
Domínguez, que estuvo cuatro temporadas en la primera plantilla del Atlético Madrid (desde la 2008-2009 hasta la 2011-2012), lamentó que las lesiones y la "posibilidad de quedar inválido con 27 años" le han obligado a dejar el fútbol como jugador.
"He estado los últimos años jugando en unas condiciones físicas pésimas. Me he visto obligado a seguir jugando y eso me ha llevado a dos operaciones. Me ha conducido a unas secuelas que a día de hoy sigo teniendo y esto me deriva a que hoy me tengo que despedir de vosotros y de este deporte que tanto me apasiona", indicó en su mensaje el futbolista, que llegó a debutar con la selección española absoluta, ante Serbia, con
Vicente del Bosque como técnico.
"A nadie le gustaría ser un inválido con 27 años. Y este es el precio que voy a tener que pagar", concluyó Álvaro Domínguez.
El defensa madrileño, que llegó a ser uno de los fijos del
Atlético de Madrid hasta la llegada del argentino Diego Pablo Simeone, fue traspasado al
Borussia Monchenglabach por 8 millones de euros.
Igualmente, fue titular en el equipo alemán como central y también como lateral izquierdo, hasta que sufrió una grave lesión en de clavícula hace tres temporadas. Se perdió la mitad del curso, aunque pudo disputar los últimos meses de competición. Acabó con 21 partidos jugados en la
Bundesliga.
En el ejercicio siguiente disputó 24 encuentros con el
Borussia Monchengladbach, pero problemas de espalda le perseguían. La dolencia cada vez fue a peor y tuvo que volver a ser operado. Desde entonces, solo ha podido jugar seis partidos.
Los problemas de espalda han terminado por obligar al jugador a dejar el deporte en activo, con 27 años y ocho en la elite del fútbol profesional.