Alcanzó el
cénit de su carrera como jugador del
Real Betis. Y eso que solamente vistió una temporada de verdiblanco, tras convertirse en la sorpresa de última hora que brindó
Serra Ferrer a
Quique Setién en el largo verano de 2018, con
Rafinha como primera opción para potenciar el centro del campo heliopolitano. La negativa del hispano-brasileño a incluir una
opción de compra en el contrato de cesión pactado con el
Barcelona aceleró la negociación con el
PSG, que aceptó
tres millones de euros (sueldo incluido) para prestar al argentino, reservándose en La Palmera un traspaso al precio cerrado de
22 kilos que, lógicamente, ejerció por adelantado. Y es que el rendimiento del rosarino, reconvertido de mediocentro a
mediapunta y hasta 'falso 9', había sido espectacular:
16 goles y seis asistencias en 45 partidos oficiales, con casi
3.500 minutos a sus espaldas.
Lógico que el
Tottenham no se pensara mucho reclutar la campaña siguiente a
Giovani Lo Celso, frustrando una pareja con
Nabil Fekir que habría sido espectacular. En la planta noble del Benito Villamarín obtuvieron una plusvalía superior a los 22 millones, después de acordar una
cesión por 16 y una opción de compra por 22 que, obviamente, era una
obligación tácita, pues no es tonto precisamente el dueño de los 'Spurs' para regalar la primera de las dos cantidades, astronómica y sólo comprensible dentro de lo que se conoce en el mundillo como compra en diferido, por aquello del
'Fair Play' financiero y otras exigencias fiscales. Desde entonces, volviendo a lo deportivo, el
declive del internacional albiceleste ha sido una realidad, bajando su tasación a más de la mitad (de 50 millones como bético a los 22 actuales).
Los
2.152 minutos de la 19/20 (con dos goles y tres asistencias) pasaron a ser
1.524 el curso pasado (5+1), al tiempo que éste ha pasado a ser un
secundario de lujo para
Antonio Conte (19 pariciones, cada vez más fugaces, con menos de 1.000 minutos una vez traspasado el ecuador). Incluso, pese a su habitual perfil bajo en las redes, Gio tuvo que salir al paso hace poco para explicar que no tenía lesión alguna que le impidiese ser convocado en el duelo de la Premier League ante el
Chelsea, encontrando
refugio con la
selección argentina, con la que disputó el cuarto final del partido de las Eliminatorias ante
Chile (con triunfo albiceleste por 1-2) en sustitución de
Rodrigo de Paul. Y, además, disfrutando de unos días de concentración y reflexión en su tierra para estudiar su
futuro inmediato.
Un siguiente paso que podría ser inminente, porque maneja ofertas para salir cedido en este mercado invernal que encara sus jornadas finales. La del
Galatasaray no lo acababa de convencer, lo del
Sevilla FC (hipotético
trueque por Diego Carlos) no pasó de rumor y el retorno al Betis es
inviable en estos momentos, pero una de última hora sí cuadra más en sus intereses, sobre todo porque le permitiría regresar a un país y a una Liga que conoce para intentar relanzar su carrera. Se trata de Francia (
Ligue 1), pues el
Olympique de Lyon considera a Lo Celso una de sus primeras opciones para suplir la marcha de
Bruno Guimaraes al Newcastle. De momento, el antiguo club de Fekir reinvertirá unos 18, según 'L'Équipe', en el atacante del Brest
Romain Faivre, mientras que prefiere un préstamo ahora de otro mediocampista con características distintas (defensivas o mixtas al menos) para estudiar mejor el recambio del brasileño en verano.
Tras negarse la
Juventus a soltar a mitad de ejercicio al uruguayo
Bentancour, el próximo objetivo del OL es el otrora bético, que se muestra más receptivo. Este viernes, según avanza el periodista especializado Fabrizio Romano, habrían comenzado las conversaciones entre clubes, exigiendo el Tottenham que los galos asuman el sueldo completo de Gio (
casi 400.000 euros mensuales) y que la operación se cierre con un
préstamo remunerado y sin opción de compra. La solución, para bien o para mal, llegará en las próximas
72 horas, pues el 'deadline' apremia.