Iker Castaño3 min lecturaEn plena temporada de verano, son muchos los españoles que buscan su lugar paradisiaco para desconectar de la rutina y no hace falta irse muy lejos para disfrutar de las playas más espectaculares que te sientes como en las mismas Maldivas. Andalucía cuenta con varias playas vírgenes donde poder disfrutar de paisajes protegidos, con una inmejorable calidad del agua y de la arena. Destacamos cuatro:
Una de ellas es la playa de Maro, en Nerja, Málaga. Una pequeña playa salvaje considerada como una de las mejores de España ubicada en el paraje natural de los Acantilados de Maro. Con medio kilómetro de extensión su arena gruesa, aguas limpias y transparentes, hacen de la playa malagueña una visita muy recomendable. Además se puede realizar snorkel o submarinismo y descubrir la impresionante variedad de fauna marina existente. Es galardonada con la Bandera Azul, distintivo que otorga la Fundación Europea de Educación Ambiental.
La segunda playa es la de Zahara de los Atunes, con arena fina y dorada y aguas cristalinas, ideal tanto para el verano como para paseos calmados por ella en otras épocas del año. Situada entre los cabos de Gracia y de la Plata, la playa de alrededor de 1500 metros y unos 50 de ancho, es un lugar altamente recomendable para visitantes que quieran disfrutar de la tranquilidad de la zona, tranquila hasta en la época de verano.
La Playa de Bolonia, tercera de nuestras opciones destacadas, es una playa salvaje situada en Tarifa. Limita al oeste por punta Camarinal y su playa de Arroyo Cañuelo, y al este por punta Paloma; en el interior está bordeada por la sierra de La Plata, la sierra de la Higuera y la loma San Bartolomé. Es un entorno natural con parajes llenos de naturaleza casi virgen, arena fina y blanca, aguas cristalinas y una agradable brisa marina. La playa tiene unos 4 kilómetros de largo y unos 70 metros de ancho.
La playa de Enmedia del Cabo de Gata es otra de las opciones a destacar. Cuenta con fina y dorada arena, de aguas turquesas, haciendo que la experiencia de los visitantes sea extraordinaria. Sólo tiene 130 metros de longitud y unos 35 de anchura, pero su belleza es impactante. Es una verdadera joya natural situada en la zona de Níjar. Se trata de una playa virgen que cuenta con unas condiciones óptimas para un baño seguro y desde la que se observan unas vistas fantásticas.