Al ver esta noticia u otras por el estilo que proliferan estos días en prensa, radio, televisión, redes sociales y soportes digitales, seguramente más de un lector habrá exclamado ¿Otra vez hay que cambiar la hora? ¿No decían que eso de ajustar una hora arriba o abajo en invierno y verano lo iban a quitar? Pues la respuesta a la primera pregunta es un 'Sí' rotundo que, por extensión, viene también a remarcar un 'No' en la constestación a la segunda interrogativa. El pasado 21 de marzo, a las puertas del inicio de la Semana Santa, el hemisferio norte se despedía del período invernal y saludaba a la primavera, que como todo el mundo sabe viene con temperaturas más suaves y un considerable aumento de las horas de luz diarias, algo que los países situados más al sur (dentro de esta mitad superior del globo) están obligados a aprovechar de manera eficiente.
El nuevo cambio de horario tendrá lugar en la madrugada que va del sábado 30 al domingo, día 31 de marzo de 2024. En esta ocasión, a diferencia de lo sucedido hace cinco meses, tener más horas de luz para poder estirar las tardes al salir del trabajo y aprovechar mejor los días tiene un precio a pagar: el próximo domingo nos levantaremos con una hora menos de sueño. A las 02:00 serán las 03:00 horas. Ya saben, los relojes digitales se cambiarán de manera automática, pero en los de pared y en el coche tocará modificarlos a mano. ¡No te olvides! Pues cada año siempre hay algún susto o alguna tardanza en estos primeros días primaverales.
Desde hace años se viene debatiendo el final de esta práctica de cambiar dos veces la hora cada año para ajustarse a los horarios de invierno y verano. El debate lo propusieron países del norte de Europa, más cómodos con el reloj invernal al amanecer antes y poder ahorrar esas horas de luz al inicio de la jornada del día. En el sur del continente, en cambio, las costumbres hacen que se valore más el crono estival para alargar el día tras salir de trabajar. En caso de decidir suprimir estas modificaciones, el acuerdo no sería sencillo.
Para testar lo que piensan los ciudadanos, en 2018 la Comisión Europea propuso una encuesta que, en el caso de España, arrojó un claro 64 por ciento de partidarios de quedarse para siempre con el horario de verano. A pesar de estos resultados, las diferencias por países eran notables (las circunstancias de cada uno son muy distintas) y la unificación de un criterio se antojaba misión imposible. Así, la Eurocámara dejó todo como estaba tras emitir 384 votos en contra de acabar con el cambio estacional, por sólo 153 a favor. Por lo tanto, la respuesta es 'No', no será el último cambio.
Recientemente, el Gobierno español publicó en el Boletín Oficial del Estado (BOE) las fechas de los tres próximos cambios a horario invernal y los tres del consiguiente regreso al reloj estival. El próximo cambio toca el 27 de octubre de 2024. Estas son las fechas de las seis próximas modificaciones hasta 2026:
Horario de invierno (a las 03:00 son las 02:00)
- 2024: Domingo, 31 de marzo- 2025: Domingo, 30 de marzo- 2026: Domingo, 29 de marzo
Horario de verano (a las 02:00 son las 03:00)
- 2024: Domingo, 27 de octubre- 2025: Domingo, 26 de octubre- 2026: Domingo, 25 de octubre