Iker Castaño3 min lectura¿Qué sería de Sevilla sin sus tapas? Difícil imaginar una ciudad andaluza sin esta opción en el menú de cualquier bar o restaurante de cada rincón de Andalucía. En la capital hay numerosos establecimientos que te dan la opción de escoger tapas, raciones y platos, en muchos casos a un precio económico y con más cantidad de lo que estamos acostumbrados a ver. Es el caso de un bar en Triana que se ha hecho viral por lo enormes que son sus tapas que lleva abierto ni más ni menos que hace veintiocho años.
El establecimiento del que hablamos se encuentra en el emblemático barrio sevillano de Triana y ahí se encuentra El Gordito de Triana, un bar que ha capturado la esencia de la cocina mediterránea durante casi tres décadas. Ofrece una propuesta de fritura, carne, guisos y aliños y la filosofía no ha cambiado prácticamente: ofrecen comida casera, bien servida y a precios accesibles.
El local está casi siempre lleno hasta la bandera, reflejando el esfuerzo y la dedicación que se han invertido a lo largo de los años en este bar, y eso que la familia pasó una grave crisis en 2008 que les obligó a cerrar por la presión económica y la preocupación por la hipoteca.
Conocido por sus grandes tapas y su ambiente acogedor, el bar ofrece una variedad de platos que incluyen boquerones al limón, solomillo y churrasco. Las lagrimitas, acompañadas de patatas con queso camembert y solomillo al whisky, también han sido destacadas.
En Trip Advisor les han valorado muchos clientes que han pasado en algún momento por el local. "El personal inmejorable la chica y el chico que nos sirvió de lujo los dos, comida de buena calidad, tapas bastante generosas y rapidez en el servicio, vaya todo estupendo y a un precio bastante razonable. Somos de fuera de Sevilla pero sin duda volveremos", apuntó una clienta.
Otro también recalcó que su experiencia fue agradable en un "estupendo sitio. Gente genial y comida muy rica. Muy buena relación calidad-precio. Los caracoles buenos buenos", indicaba. La clientela no sólo destaca la generosidad de las raciones, también el trato cálido y cercano del personal.
A pesar de la sencillez de los platos, en muchos casos con buena cantidad, el sabor y la calidad superan las expectativas, lo que ha contribuido a que El Gordito de Triana se convierta en un punto de referencia en Triana y en Sevilla.