Este verano atípico en lo meteorológico va a seguir siendo igual de raro, al menos esta semana. Cuando una parte de España vivirá una intensa jornada de calor, la otra sufrirá abundantes tormentas. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ya ha encendido la alarma sobre lo que se viene en los próximos días.
"A lo largo de la semana subirán las temperaturas en toda España. El jueves podrán superarse los 40 ºC en puntos del este y sur de la Península. Calor también en los dos archipiélagos", indican desde la AEMET.
La buena noticia es que "de cara al fin de semana podría haber un nuevo descenso térmico", lo que daría un respiro en lo que al calor se refiere.
Esto por un lado, porque por otro está la llegada de lluvias y un frente frío, lo que ha llevado a la AEMET a lanzar un comunicado urgente.
"Se prevé la entrada y paso de un frente atlántico que, en el tercio noroeste peninsular, dejará cielos nubosos o cubiertos y precipitaciones, sin descartar que se extiendan a zonas aledañas más al este y al sur. Serán más abundantes en Galicia y Asturias, incluso localmente fuertes o persistentes. En el resto del país predominará tiempo estable con cielos poco nubosos en general, si bien se darán intervalos de nubes bajas matinales en el área mediterránea, pudiendo dejar bancos de niebla, más persistentes en Alborán, donde no se descartan brumas costeras. Asimismo, se desarrollará nubosidad de evolución en el interior nordeste, con baja probabilidad de producirse alguna tormenta aislada y ocasional, más probable en la Ibérica oriental. También se darán intervalos nubosos en el norte de las islas Canarias, sin descartar alguna precipitación débil", indican en su previsión.
"Soplarán vientos de componente este en el área mediterránea oriental, variables en el Cantábrico y con predominio del oeste y suroeste en el resto, rolando a noroeste en el noroeste. Se prevén flojos en general, más intensos en el Estrecho, Ebro, Ampurdán, meseta Norte y Galicia. Alisios en Canarias con intervalos de fuerte y rachas muy fuertes en zonas expuestas", reza el mismo comunicado sobre el viento.
Esto hará que en muchos lugares de España se cambie próximamente la sombrilla de la playa por el paraguas, mientras que otros tendrán que salir a la calle siempre acompañados de una botella de agua debido al sofocante calor. Una inestabilidad impropia de esta época del año y que por ahora parece que no se va a marchar.