Manuel Pedrero5 min lecturaLuis Rubiales sigue en el ojo del huracán tras su polémico y controvertido beso a Jenni Hermoso durante la celebración del pasado Mundial de Australia y Nueva Zelanda. El ya expresidente de la Real Federación Española de Fútbol ha conocido en el día de hoy la oficialidad por parte de la FIFA de su inhabilitación por un periodo de tres años en cualquier cargo relacionado con el fútbol tanto en el ámbito nacional como internacional. Pero no ha sido la única mala noticia que le ha llegado al de Motril. Por otra parte, Rubiales ha sido denunciado por alzamiento de bienes después de vender su lujoso ático de la calle Ferraz por valor de 2,5 millones de euros.
El presidente de la Plataforma 2030 contra la Corrupción y la Criminalidad Organizada en el Fútbol, Gonzalo Azkarate, ha sido el encargado de interponer la denuncia el pasado 23 de octubre, según adelanta El Confidencial. Lo hizo ante el Juzgado de Instrucción Decano de Madrid por un presunto delito de alzamiento de bienes.
En la denuncia presentada por Azkarate considera: "Que de dichas causas penales, en su caso administrativas, se pueden derivar responsabilidades civiles muy importantes, lo que sin duda conoce Luis Rubiales y conocía en el momento de poner a la venta y finalmente vender el ático del que era propietario en la madrileña calle Ferraz". Además, añade: "Resulta patente que la venta del mencionado ático pone en riesgo la realización efectiva de las responsabilidades civiles que resulten de los procedimientos penales en curso en los que Rubiales es investigado".
En la denuncia se recuerda igualmente que, según el Código Penal, "el delito que nos ocupa castiga a quien se alce con sus bienes en perjuicio de sus acreedores, a quien, con el mismo fin, realice cualquier acto de disposición patrimonial o generador de obligaciones que dilate, dificulte o impida la eficacia de un embargo o de un procedimiento o de apremio, judicial, extrajudicial o administrativo iniciado o de previsible iniciación", se indica.
Rubiales compró el ático de la céntrica calle madrileña de Ferraz por un precio de 1.900.000 euros. Se trata de una vivienda de 141 metros cuadrados, con una terraza de 100 metros cuadrados, piscina privada, dormitorios en formato suite y dos plazas de garaje. La compra fue costeada en parte con la ayuda a la vivienda de 3000 euros al mes de la RFEF. Dio como entrada, y por tanto pagó, 400.000 euros al contado.
Según el informe de la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE) adscrita a la Fiscalía Anticorrupción, el expresidente de la RFEF no debió percibir esa ayuda a la vivienda porque ya residía permanentemente en Madrid después de vender su casa de Valencia en 2019. Este informe concluye que "aunque se sostuviera que el acuerdo de la asamblea general de 26 de octubre de 2020 suprimió el requisito de tener domicilio habitual fuera de la Comunidad de Madrid, al menos desde mediados del año 2019 hasta el 26 de octubre de 2020 (fecha de la asamblea general de 2020), el presidente no tenía derecho a vivienda", dicta.
Además recuerda que "su vivienda habitual de Valencia fue vendida el 13 de junio de 2019, por lo tanto, se tuvo que haber inscrito en el padrón municipal de un municipio de la Comunidad de Madrid, previsiblemente en la capital, puesto que su domicilio habitual estuvo en esta localidad".
Y por último cabe citar, que Luis Rubiales ha puesto a la venta este lujoso ático por 2,5 millones de euros, por lo que de confirmarse la venta por esta cuantía habría generado un beneficio o plusvalía de 600.000 euros con la que se habría lucrado a costa de su cargo en la RFEF.