Quincy Promes entra en prisión

El futbolista neerlandés, ex del Sevilla FC, se enfrenta a una pena de cárcel de seis años por tráfico de drogas

Quincy Promes entra en prisión
Quincy Promes durante un entrenamiento con la selección holandesa - Cordon Press
Luisma SánchezLuisma Sánchez 3 min lectura

Quincy Promes entrará en prisión definitivamente, acusado por tráfico de drogas. El futbolista neerlandés cumplirá seis años en prisión. La carrera del futbolista de 32 años, ex sevillista, ha dado un vuelco y con total seguridad no volverá a pisar un terreno de juego nunca más. Se acabará su carrera deportiva, de la que se recuerdan más episodios extradeportivos que su rendimiento sobre el verde.

El año pasado, la Justicia neerlandesa también sentenció a Promes a un año y medio de prisión por apuñalar y “causar graves lesiones físicas” a su primo en una rodilla durante una fiesta familiar en julio de 2020.

La fiscalía neerlandesa había solicitado nueve años de prisión para el exjugador del Ajax, que tiene 32 años, y se encuentra en estos momentos en Rusia, donde juega para el Spartak de Moscú desde 2021. Un tribunal neerlandés condenó finalmente este miércoles en rebeldía a Quincy Promes a seis años de prisión por su implicación en el tráfico de más de 1.350 kilos de cocaína en dos cargamentos que viajaron desde Brasil hacia el puerto belga de Amberes en enero de 2020.

El Equipo de Inteligencia Criminal (TCI) de la policía neerlandesa recibió la información que indicaba que Promes estaba involucrado en el tráfico de cocaína, poseía teléfonos criptográficos y habría invertido 200.000 euros en el negocio ilegal, por lo que decidió iniciar una investigación criminal al futbolista. Además, se consideró que el jugador, al “tener dinero para invertir” en este negocio ilegal, “está en un escalón alto en la escala organizacional” del grupo de narcotraficantes.

La fiscalía acusa a Promes y a otro sospechoso, que también recibió hoy 6 años de prisión, de “importar, exportar, transportar y poseer 1.362,9 kilos de cocaína oculta en un cargamento de sal marina procedente de Brasil” y haber repartido la droga en dos contenedores para moverla en barco por Escalda Occidental (provincia neerlandesa de Zelanda) hasta el puerto de Amberes”.

La droga fue retirada de uno de los contenedores a finales de enero de 2020, mientras que el segundo contenedor pudo ser interceptado a tiempo por la policía belga. El Ajax, equipo para el que jugaba el internacional neerlandés cuando fue detenido en 2020, lo vendió dos meses después al Spartak de Moscú por 8,5 millones de euros más variables, casi la mitad de los 15,7 más variables que pagó al Sevilla, equipo en el que militó durante la temporada 2018/19.