La estadounidense Katie Ledecky, la nadadora con más oros y medallas en la historia de los Juegos Olímpicos, con un total de ocho preseas doradas, es noticia no sólo por los metales conseguidos en París.
A esos ocho oros hay que sumar las tres platas y el bronce que Ledecky contabiliza en un palmarés olímpico que la de Maryland estrenó con apenas 15 años en los Juegos de Londres 2012 tras proclamarse campeona de los 800 libres.
Título al que Ledecky añadió cuatro más en Río 2016, en los que la norteamericana se impuso en los 200, 400 y 800 libres, además de contribuir decisivamente al triunfo de Estados Unidos en la final del relevo 4x200 libre.
No fueron las únicas medallas que Ledecky conquistó en la capital brasileña, donde la nadadora norteamericana debió 'conformarse' con la plata en la final del 4x100 libre.
Ledecky amplió cinco años más tarde sus medallas en los Juegos de Tokio, en los que sumó su tercer oro consecutivo en la prueba de los 800 libres y se convirtió en la primera campeona olímpica de los 1.500.
La nadadora estadounidense suma en París el oro en los 1.500 y la plata en el relevo de 4x200 metros, convirtiéndose en la nadadora más condecorada en la historia olímpica. Eso si, cifras muy lejanas de las del también estadounidense Michael Phelps, que no sólo es el nadador más laureado, sino el deportista más exitoso en la historia olímpica tras ganar un total de veintiocho medallas, veintitrés de ellas de oro.
Tras uno de sus éxitos en París 2024, Ledecky fue preguntada en la NBC sobre si en alguna ocasión ha orinado en la piscina. "Sabes, te tengo que preguntar esto porque estoy mirando esta piscina y veo lo largas que son las calles... ¿Cómo no orinar en la piscina?", le preguntó la humorista Leslie Jones.
"Definitivamente no", dijo la nadadora, una respuesta que no contentó a Jones. "¿Nadie orina en la piscina?", replicó. "No puedo hablar por otras personas... Definitivamente, no puedo hablar por otras personas, pero trato de no pensar en eso", concluyó Ledecky.
Dicha cuestión tiene su explicación, y es que recientemente el Wall Street Journal publicó un artículo titulado 'The Dirty Secret of Olympic Swimming: Everyone Pees in the Pool' (El secreto sucio de la natación olímpica: todo el mundo orina en la piscina).
"Entre una hidratación intensa y trajes de baño ajustados, los deportistas dicen que cuando la naturaleza los llama, a menudo no tienen otra opción que confiar en que el cloro de la piscina hará su trabajo", dice dicho artículo.
Hay que recordar que en el pasado, otros grandes nadadores como Michael Phelps, el mejor de todos los tiempos, confesó que es una práctica habitual. "Todo el mundo orina en la piscina... Es algo normal para los nadadores. Cuando estamos en el agua durante dos horas no salimos afuera para orinar. El cloro lo disuelve así que no es tan malo", dijo Phelps al Wall Street Journal en 2012.