Erling Haaland no solo es un nombre que resuena en el mundo del fútbol por sus impresionantes estadísticas goleadoras, sino también por su enfoque obsesivo en el cuidado de su cuerpo y rendimiento. Su determinación por alcanzar la excelencia abarca desde su régimen de sueño hasta su dieta, y recientemente se ha conocido una peculiar obsesión: el pescado noruego.
Las cifras que Haaland acumula son estruendosas y podrían cambiar la narrativa del fútbol moderno si continúa esta tendencia. Más allá de su efectividad frente al arco rival, el jugador del Manchester City se sumerge en detalles que van desde el descanso hasta la alimentación para maximizar su rendimiento.
La obsesión de Haaland por su cuerpo va más allá de lo convencional. Utiliza un anillo que mide la calidad del sueño, la evolución de la temperatura, el estrés y la frecuencia cardíaca. Además, se somete a análisis de sangre semanales para monitorear de cerca los valores de su organismo.
La dieta de Haaland es tan rigurosa como su entrenamiento. Incluye corazón e hígado de res, ricos en vitamina B, hierro, fósforo, cobre y magnesio. Haaland defiende su elección de alimentos de calidad y caseros, destacando la importancia de la procedencia de la carne. "Creo que comer comida de calidad que sea lo más casera posible es lo más importante", compartió en redes sociales.
La última obsesión de Haaland ha llevado su exigencia al pescado noruego. Descontento con la calidad del pescado en Manchester, solicitó que se trajera su producto favorito directamente desde Noruega. Según informes, ha gastado una fortuna para disfrutar del mejor salmón, un alimento que incorpora a su dieta semanal para obtener vitamina D, B12, selenio e yodo.
Haaland comprende la importancia del descanso en su rendimiento. Apaga su teléfono móvil mucho antes de acostarse y lo deja sin notificaciones para evitar distracciones. Utiliza gafas con filtro de luz azul en las horas previas a dormir para bloquear la alta energía emitida por pantallas digitales.
La obsesión de Haaland no pasa desapercibida, incluso para celebridades como Kim Kardashian. El delantero tuvo un encuentro con la estrella de la televisión, quien aprovechó para hablar con su hijo, Saint West, un gran admirador del noruego. Haaland, además, ha compartido momentos con otras figuras del fútbol, como Lionel Messi, Neymar y Cristiano Ronaldo.
"Estaba en Italia y veo a Erling Haaland. Me volví una loca de mierda porque sé que a mi hijo le emocionaría mucho, sabes que es su cosa. Así que me siento como una perdedora haciendo una videollamada en este evento y diciendo ‘¡Saint, nunca adivinarás con quién me encontré!’. Me he convertido en esta persona que es como... ¡Lo siento!", dijo Kardashian en una entrevista a GQ Sports.
Erling Haaland no solo está dejando huella en el campo de juego, sino que redefine la dedicación y obsesión por el rendimiento en el deporte moderno. Su enfoque meticuloso y su búsqueda constante de la excelencia podrían inspirar a una nueva generación de atletas a considerar todos los aspectos de su bienestar para alcanzar el máximo rendimiento.