La temporada de Fórmula Uno ha terminado y con ella las rivalidades entre pilotos, que hasta el próximo mes de marzo volverán a ser compañeros tranquilos, sin ningún tipo de roce dentro de los circuitos. Además, con la Navidad a la vuelta de la esquina, el espíritu de estas fiestas ha invadido el paddock.
Con la plantilla de 2025 totalmente decidida, en la que el despido de Checo Pérez y el salto de Lawson a Red Bull han sido los últimos cambios, los pilotos se olvidan de la competición y se regalan entre ellos para celebrar la Navidad. Y este año el azar ha querido dar emoción a este amigo invisible de la F1, haciendo que Sainz le tenga que regalar a Colapinto, al que ha dejado sin asiento en la categoría reina del automovilismo.
Franco Colapinto se ha quedado sin hueco en el Gran Circo para la próxima temporada. Tras un debut espectacular en el que ha llamado la atención tanto de los equipos, pilotos y aficionados, el joven argentino tendrá que dar un paso atrás y alejarse de la Fórmula Uno, hasta que alguna escudería apueste por él para los próximos años, o que haya un milagro navideño y Alpine tome la decisión más esperada.
Pero con el futuro de Franco fuera de la F1, Carlos Sainz ha aprovechado para echar más leña al fuego en esta 'lucha'. El piloto español ha sido el gran responsable de que el argentino tenga que decir adiós, ya que va a ocupar su asiento en el monoplaza. Y como su 'Santa secreto' ha querido 'reírse' de él y regalarle varios pasatiempos, para que se entretenga en todo el tiempo libre que va a tener fuera de la parrilla.
El nuevo piloto de Williams le ha regalado a Colapinto puzzles y plastilinas, que el 'rookie' ha utilizado para hacer un coche, el que le falta para el año que viene, y que le va a regalar a Carlos, como una especie de símil de la situación que ha vivido con Williams. Pero este amigo invisible ha dado para mucho más, especialmente para provocar unas risas en los aficionados de la F1, que ya notan el vacío de los fines de semana sin Gran Premio.
En este 'Secret Santa' hay quién apuesta por unos regalos más serios mientras que otros se complican menos, pero este intercambio de detalles no ha dejado indiferente a nadie. Carlos Sainz ha recibido un disfraz de Chili, su seña personal, de parte de Guanyu Zhou. Norris ha recibido unas clases de pádel, Lawson un coche de juguete (antes de recibir el mejor regalo con la apuesta de Red Bull para que sea compañero de Verstappen) y Leclerc juguetes para su perro, en una edición en la que no han participado grandes protagonistas como Fernando Alonso o Max Verstappen.