El Real Madrid ha convertido el Santiago Bernabéu en uno de los epicentros de la capital de España. Los conciertos, desde el final de la temporada futbolística, han sido una constante, pero no ha agradado a todo el mundo. Muchos vecinos se han quejado de los ruidos que se producen en el estadio merengue, llegando al punto de presentar una querella. Este viernes, esta medida ha recibido un espaldarazo.
Tal y como apunta RNE, la magistrada del juzgado 53 de Madrid, Mónica Aguirre de la Cuesta, ha admitido a trámite la querella de la asociación vecinal 'Perjudicados por el Bernabéu'. El Real Madrid, propietario del estadio, ha sido denunciado. Más concretamente, la sociedad Real Madrid Estadio, y su administrador único, José Ángel Sánchez Periañez.
Estos han sido llamados a prestar declaración el próximo 24 de octubre. ¿Cuál ha sido el motivo de la querella? Un presunto delito medioambiental, ya que se les imputa por los conciertos que se han celebrado en el estadio del conjunto blanco desde el pasado 26 de abril. Esto se admite debido a que se entiende que se han superado los límites de ruido establecidos por la normativa del Ayuntamiento de Madrid, además de interpretar que no se ha tomado ningún tipo de decisión a la hora de tratar de limitar este aspecto, que supone una considerable molestia hacia los vecinos de la zona.
A pesar de que Real Madrid Estadio sí ha sido imputado de las formas citada anteriormente, los que no han entrado en esta querella son el alcalde de la capital, José Luis Martínez Almeida, y el concejal de Medio Ambiente, Borja Carabante. La magistrada ha argumentado para ello que “no corresponde a este Juzgado analizar la corrección del destinatario de los expedientes, las sanciones impuestas y la graduación de las mismas, sin que existan indicios de que en la tramitación de los expedientes se haya infringido de forma clara y evidente algún precepto legal que pueda encuadrarse en el tipo penal de prevaricación".
Además, se debe tener en cuenta otro aspecto clave. La Comunidad de Madrid, en 2019, cuando le concedió la licencia al cuadro madridista, no reflejó en el documento ningún uso que fuese no deportivo, por lo que cada evento, en este caso conciertos, debía contar con un permiso especial. Esto se produce después de que el Ayuntamiento y la entidad llegaran a un acuerdo para limitar a las 23.00 de la noche los conciertos y será el propio club el que se encargue de la limpieza de los alrededores del Santiago Bernabéu,