El
Real Betis Balompié traspasa fronteras, nadie duda de su universalidad y es un equipo que genera mucha positividad allá donde se habla de él. Por ello, no es raro que se le vea lejos del fútbol o fuera de la ventada deportiva, ya que muchas personas conocen, de primera mano, que en el conjunto asentado en en el estadio
Benito Villamarín tiene un gran atractivo y un enorme potencial comercial y económico.
Esto es lo que ha ocurrido en la película
La Burbuja, que ha estrenado la plataforma de streaming
Netflix este mismo 1 de abril, donde en una de las escenas dos protagonistas del largometraje interactúan, vistiendo uno de ellos la camiseta del
Real Betis Balompié. El chico le dice a la chica que está jugando al fútbol (europeo, en Estados Unidos se conoce nuestro fútbol como soccer) y que lo está haciendo con el
Betis, mientras se puede contemplar de fondo como compañeros o amigos suyos practican sus habilidades. Para de paso entonar el clásico y ya mítico "
Musho Betis".
La burbuja, la película donde sale la camiseta del Betis
La burbuja (The bubble) es una película de comedia que toma elementos del subgénero de cine dentro del propio cine llevando su premisa al dificultoso rodaje de una película durante el confinamiento por coronavirus. Dirige el film alguien tan cercano a los terrenos cómicos como Judd Apatow (Virgen a los 40, Lío embarazoso). En el reparto podemos encontrar entre otros a Karen Gillan (Guardianes de la galaxia o Oculus), Pedro Pascal (The Mandalorian o Wonder Woman 1984) o David Duchovny (Expediente X o Californication).
La Burbuja nos cuenta en clave de parodia el rodaje de una película de ciencia ficción en medio de un periodo de confinamiento en Inglaterra. Las estrellas de la película tendrán que hacer una cuarentena sin contacto alguno de 15 días antes de comenzar el rodaje. Una vez pasada, la convivencia se va haciendo más difícil entre ellos y los gags se suceden unos a otros, con menos aciertos de los deseables.
Todos los cameos del Betis en el cine y el espéctaculo
No es la primera, ni parece que sea la última vez que