La plantilla de la sociedad Metro de Sevilla, participada mayoritariamente por la corporación Globalvía y en un 11,76 por ciento por la Junta de Andalucía,
ha secundado este lunes "al cien por ciento" la huelga indefinida iniciada el Sábado de Pasión y suspendida durante buena parte de la Semana Santa, en demanda de que el nuevo convenio colectivo incluya un alza salarial del diez por ciento.Iván Román, uno de los miembros del comité de empresa del metro, ha explicado a Europa Press
que todos los trabajadores indefinidos de la plantilla han secundado este lunes el paro técnico comenzado el Sábado de Pasión, después de que la huelga quedase temporalmente suspendida el Domingo de Ramos por lo señalado del día, la mañana del Martes Santo en protesta por los "excesivos" servicios mínimos estipulados para los paros y del Jueves Santo al Domingo de Resurrección para "respetar" las festividades.
En ese sentido,
Iván Román ha explicado que más allá de los servicios mínimos estipulados por la Consejería de Empleo, Empresa y Comercio de la Junta de Andalucía, que obligan a garantizar el funcionamiento del 40 por ciento de trenes en horas punta y del 25 por ciento en horas valle, sólo habría acudido a su puesto un empleado eventual. Eso sí, este miembro del comité de empresa ha acusado a la dirección del metro de "incumplir" los servicios mínimos, al aplicar los mimos mediante trenes dobles y no con trenes simples.
Finalmente,
Iván Román ha informado de que este mismo lunes, el comité de empresa remitirá un correo electrónico a la dirección, recordando su "disponibilidad" para reanudar las negociaciones, si bien ha avisado de que la dirección estaría reclamando que para ello primero sea desconvocada la huelga, extremo que no acepta la representación de la plantilla.
DE NUEVO CONFLICTO EN EL METROEsta convocatoria de huelga indefinida, aprobada con el voto a favor de 98 de los 170 miembros de la plantilla, surge después de que entre noviembre y enero, la plantilla protagonizase numerosas jornadas de paros parciales en demanda de mejor cobertura de las bajas, excedencias y reducciones de jornada.
En aquel conflicto, la dirección de la empresa reclamaba canalizar tales demandas mediante la negociación del nuevo convenio colectivo, pues el anterior texto expiró el pasado 31 de diciembre, y finalmente el pasado 22 de enero la plantilla del metro acordó un "paréntesis" en sus movilizaciones, para intentar lograr sus reivindicaciones mediante la negociación del nuevo convenio, que habría arrancado al comenzar febrero.
En ese sentido, la dirección del metro avisa de que en el marco de dicha negociación, el comité de empresa había reclamado un alza salarial del diez por ciento a cambio de no promover un "conflicto" laboral para las fechas clave de Semana Santa, y después "continuar negociando otros aspectos" del convenio colectivo.
"Teniendo en cuenta el poco tiempo transcurrido desde que se inició la negociación, los avances obtenidos en las reuniones mantenidas hasta la fecha, así como el alcance de los aspectos que se están evaluando, resulta muy desproporcionada la medida adoptada de convocar una huelga", asevera la dirección del metro.
EL SALARIOEl presidente del comité de empresa del metro, Juan Lorenzo Vázquez, admitía de su lado que demandar un alza salarial del diez por cierto "puede sonar fuerte", pero avisaba de que las retribuciones de la plantilla llevan "muchos años sin subir", mientras el metro cierra año tras año sus ejercicios anuales "con beneficios", cosechando en 2018 un beneficio de 18,3 millones de euros.
La dirección de la empresa, por su parte, insiste en que el comité no acepta su propuesta para un incremento retributivo según la evolución del IPC, más un cinco por ciento adicional en función de las productividades para los próximos cinco años, reclamando a la representación de la plantilla que desconvoque la huelga para reanudar la negociación en toda regla.