Con sus defectos, el nuevo formato de Copa ha devuelto la emoción a las primeras rondas y son ya varias las sorpresas acumuladas en los albores de la competición. Si hasta ahora había caído algún Primera, ayer estuvo a punto de cobrarse una pieza de caza mayor. Todo un Barcelona que en Ibiza se vio fuera de la competición durante muchos minutos y que no resolvió la papeleta hasta el minuto 94 gracias al postrero gol de Griezmann.
Hoy el Betis tendrá enfrente al Rayo Vallecano, un equipo construido para pelear por el ascenso y cuyos jugadores ven en la Copa la oportunidad de darle una gran alegría a su afición. Vallecas se volcará con los de Jémez, por lo que hace bien Rubi en ir con toda su artillería para dar pasos en el camino más corto hacia un título... o hacia un sonoro batacazo.