Se avecinan semanas
movidas en los despachos del
Real Betis, que entrará con el cambio de año en el último semestre de vinculación con
Kappa, un periodo límite para decidirse entre la oferta de
renovación presentada por la firma italiana o las de otros aspirantes a convertirse en
espónsor técnico de la entidad verdiblanca.
Hummel (que mantiene una excelente relación con varios directivos de La Palmera),
Umbro,
Joma,
Macron y un 'tapado' (con muchos indicios apuntando a
Puma) habrían adquirido ventaja sobre otras alternativas vistosas (léase
Under Armour o la marca propia
RBB) pero difíciles de conjugar con el mercado actual, si bien los turineses tienen un
derecho de tanteo al final de este cuarto año de contrato con los heliopolitanos.
Las
diferencias con Kappa no son reseñables (más bien hay
cordialidad y satisfacción con los plazos y la distribución) ni tampoco existen propuestas mareantes que convirtieran en beneficiosa una rescisión adelantada, como ya ocurrió con Macron y
Adidas (a la que hubo que
indemnizar con más de
1,7 millones de euros tras la ruptura en 2018), sino que se atiende a otros factores igualmente importantes. Lo cierto es que la institución italiana quiere seguir vistiendo al Betis, su estandarte en España, por lo que ha hecho un
esfuerzo para mejorar diferentes aspectos, si bien en la planta noble del Benito Villamarín están escuchando
alternativas.
El objetivo, entrar en el '
Top 10' de los contratos suscritos desde que se inició la
emergencia sanitaria por la Covid-19, que ha devastado, entre otros sectores, el fútbol mundial, con la necesidad en todas las latitudes de aumentar los
ingresos ordinarios y extraordinarios. Uno de los más jugosos es la elección de un espónsor técnico que, aparte de garantizar aspectos importantes como la calidad de los materiales, la diligencia en la fabricación y distribución de las prendas o la implantación en
España y otros países de
Europa y Latinoamérica donde el Betis tiene
repercusión, ofrezca cierta exclusividad en los
diseños, que se ha echado de menos en alguna ocasión. La clásica equipación de
catálogo con la que firmas reconocidas 'castigan' a los clubes menos pudientes.
El tiempo
apremia. Kappa debe conocer, si existe, la mejor oferta con que cuenta el club de Heliópolis para relevarles con el fin de, si está en su mano, igualarla para quedarse otros
3-4 años más. De lo contrario, los nuevos encargados de vestir al club verdiblancos necesitan también una
antelación suficiente para preparar sus ideas (algunas de las cuales ya acompañaron a sus propuestas comerciales para
desbancar a los de Turín) y
gestionar la fabricación y llegada de las prendas. Todo se decidirá, aunque puede que no se haga público aún, en cuestión de semanas, días incluso.
Mientras tanto, puede consultar en esta
galería.