Sin Michael Phelps ni Ryan Lochte,
Caeleb Dressel lidera la nueva generación de nadadores estadounidenses, como lo ha demostrado en Budapest, con la consecución de
siete oros, un hito solo al alcance del gran Phelps.
Dressel y
Kalisz Chase han sido la punta de lanza en hombres;
Katie Ledecky y
Lilly King, cinco oros la primera, cuatro la segunda, en mujeres.
El equipo norteamericano ha sido el gran dominador de las pruebas de natación en línea, con
18 medallas de oro.
Dressel ya está en los libros de la historia de la natación al haberse convertido en el
primer nadador capaz de ganar tres oros en una sesión de finales. Nadie nunca antes lo había logrado, ni en un Mundial ni en unos Juegos, tampoco el más grande: Phelps.
En chicas,
Ledecky se ha llevado
seis medallas, pero la noticia se centra en la que no ganó la de los 200 libre, prueba en la que
cayó por primera vez profesionalmente. Fue la italiana
Federica Pellegrini la que la ha derrotado.
Otra estadounidense, la bracista
Lilly King también ha brillado con cuatro oros y dos récords del mundo en los 50 y 100 braza. La sueca
Sarah Sjöstrom se ha llevado tres oros y un récord mundial y la local
Katinka Hosszú ha hecho doblete en las pruebas de estilos.
La piscina del Duna Aréna, una modélica instalación ubicada en la orilla del Danubio, ha vivido once récords del mundo, dos de ellos a cargo de
Adam Peaty en los 50 braza, el único hombre que ha rebajado topes mundiales en pruebas individuales en Budapest.
El medallero general lo ha dominado
Estados Unidos con
46 medallas, aunque las especialidades están muy marcadas. En
natación,
Estados Unidos se ha llevado 38, en
saltos China ha conseguido
15 de las 39 en juego, en s
incronizada Rusia ha logrado siete de los nueve oros, en
aguas abiertas ha dominado Francia y en
waterpolo los oros han sido para
Croacia (hombres) y
Estados Unidos (mujeres).
La presente edición de los Mundiales también se ha visualizado el cisma existente en el seno de la Federación Internacional de Natación (FINA) a raíz de la reelección del uruguayo Julio Maglione (81 años) como presidente.
Unos cambios en el Bureau Central (órgano de gobierno) que afectan a Europa, que cada vez se ha quedado con menos peso en el seno de la FINA.
La próxima edición se disputarán en la ciudad surcoreana de
Gwangju con lo que los Mundiales regresan a Asia diez años después (Shanghái 2009).