Alberto Viñuela9 min lectura-¿Cómo fue el comienzo de tu carrera? ¿Qué te llevó a tomar la decisión de comenzar en el motocross?
“Pues yo desde mi infancia siempre he estado rodeado de motos, mi padre ha sido siempre aficionado, ha corrido básicamente en todas las disciplinas y desde pequeño he ido siempre con él a todos lados y con 4 años, en mi cumpleaños de 4 años me regaló mi primera moto. Y desde entonces siempre me ha gustado mucho, siempre he estado muy pendiente, siempre me he conocido a todos los pilotos de todas las carreras que veíamos y desde que me monté en la moto me encantó y hasta día de hoy no me he bajado.”
-¿Cuál fue tu principal motivación para no abandonar el motocross e intentar llegar al ámbito profesional?
“Bueno, siempre he sido muy competitivo en todo lo que he estado haciendo; me gustaba sacar buenas notas, en cualquier deporte que practicamos en el colegio siempre intentaba dar lo mejor de mí mismo y me gusta ganar, me siento realizado después de trabajar mucho y logro conseguir el objetivo. Y bueno, el motocross es el deporte que más me ha gustado e intentar vivir del deporte que te gusta siempre ha sido un proceso que ha llevado su tiempo, al principio siempre ha sido un hobby cuando eres pequeño, pero vas cogiendo el gusto y ya cuando llegas a los 14-15 años que es cuando llega el momento de empezar a trabajar de verdad, pues ahí es cuando tienes que decidir si sigue siendo un hobby o tienes que dar un poco más del 100% para intentarlo, y bueno decidí que era lo que me gustaba, que era lo que quería hacer y desde entonces dedicarme a fondo con ello”.
-¿Crees que la comunidad de Andalucía ha sido la que te ha otorgado la ocasión de llegar a ser deportista de élite?
“Aquí en Andalucía es complicado, porque el centro neurálgico del motocross digámoslo así es el centro de Europa en la zona de Bélgica, Holanda. En España es complicado, bueno si estás por Cataluña y esa parte al final te pilla muchísimo más cerca, pero para nosotros los del sur y de Andalucía cualquier carrera de un Mundial en Francia o en Inglaterra o si ya sumamos también en Suecia estamos super lejos, es muy complicado estar entrenando allí con ellos, aquí hay muy pocos circuitos, en Andalucía es complicado encontrar apoyo, patrocinadores, la verdad que siendo andaluz es muy complicado llegar a la élite, tanto en el Campeonato de España y si hablamos en el Mundial pues muchísimo más”
-¿Has recibido algún tipo de ayuda o subvención económica en tus comienzos?
“Bueno, mi padre es camionero, todavía es camionero y la verdad que vengo de una familia bastante modesta. El motocross, de los deportes de motor, quizás sea de los más baratos pero es un deporte bastante caro; y bueno yo por suerte he sido muy competitivo desde pequeño, siempre he tenido buenos resultados y mi padre pues bueno me compró mi primera moto, no sé si la segunda también y ya a partir de ahí tuve buenos patrocinadores. Mi padre ya, aunque tuvo que hacer un esfuerzo grande para llevarme y para estar conmigo entrenando y se tuvo que sacrificar bastante los primeros años, pero bueno por otra parte siempre tuve apoyo de las motos, de los recambios y de lo que iba necesitando y eso es lo que me permitió pues seguir trabajando hasta volverme profesional. Ahora mismo es complicado, porque el gasto es grande y se quedan muchos pilotos por el camino, pero bueno yo la verdad que he sido toda la vida piloto Yamaha, Eduardo Castro… son patrocinadores que me han ayudado toda la vida. He estado corriendo 12 años en Brasil y siempre con dificultades pero siempre he encontrado la manera para dedicarme profesionalmente a esto, pero bueno otros no han tenido tanta suerte y se han quedado muchos buenos pilotos por el camino”.
-¿Cómo fue la experiencia de competir en Brasil? ¿Impulsan el motocross siendo la cuna del fútbol? ¿Qué diferencias tiene con España?
“Bueno, decidí irme a Brasil a finales de 2011, en 2010 gané el Mundial aquí en Europa, fui campeón del mundo y la verdad que había muy poco apoyo y prácticamente no podía dedicarme a ser piloto profesional aquí en España, así que decidí cambiar mis objetivos, fiché con Yamaha Brasil, estuve allí durante 12 años, la verdad que muy contento, llegué con un proyecto que prácticamente partía de cero, confiaron en mí para levantar el proyecto y guiarlo un poco y fue una oportunidad increíble, llegué prácticamente con nada, éramos una furgoneta y un mecánico, y ahora tenemos quizás el mayor equipo de América latina de motocross y formar parte de ese crecimiento, aparte de ganar todos los títulos que hemos ganado, varios subcampeonatos también, la verdad que super contento. Allí el motocross, del motor es el deporte más importante, se ve mucho más que la velocidad, es otro tipo de carreras y bueno el campeonato es super grande; No solo hay pilotos brasileños, hay un campeonato muy abierto, hay de todas las nacionalidades, y bueno eso hace que sea un campeonato tan fuerte. Por ejemplo, en España, como en cada país, siempre hay 4-5 pilotos buenos que salen fuera a correr, que corren carreras internacionales; Pero en Brasil no solo están esos 4-5-6 pilotos brasileños, también hay españoles, portugueses, ingleses, americanos… entonces el campeonato la verdad que es super competitivo y las marcas apuestan por ello, hay varios equipos oficiales, la verdad que es un campeonato bastante grande”.
-¿Cómo fue la experiencia de ganar el Mundial de 2010 y la preparación para conseguir tal logro?
“Bueno, fue la combinación de un sueño, algo que entrenas desde pequeño, no soñando con ello porque sabes que es complicado llegar pero bueno, siempre con eso ahí en el fondo, en el objetivo, intentar dar todos los pasos para ver si algún día tienes la oportunidad de luchar por ello; Y bueno, se presentó la oportunidad, fue un desafío bastante grande, la verdad que nos pilló liderando el campeonato sin presupuesto, no teníamos dinero casi ni para acabar el campeonato, y bueno, ahí entre todos buscamos la manera. Recuerdo que con el equipo prácticamente estuvimos 6-7 meses viviendo en el camión de las carreras porque no teníamos dinero para volver a casa, entonces tuvimos que quedarnos de ruta por toda Europa, fue un sacrificio enorme de los mecánicos, sin ver a la familia, de todos los integrantes del equipo; Pero bueno, era la manera de conseguir llegar hasta el final, la verdad que mereció la pena, fue un momento quizás deportivamente el más importante de mi vida y que después me ha abierto muchas puertas, porque aunque aquí en Europa no tuvo tanta repercusión, no me sirvió para mejorar mis condiciones pero sí en el resto del mundo, en este caso en Brasil me abrió las puertas, no es lo mismo llegar a un país siendo campeón del mundo que sólo siendo campeón de España”.