El entrenador del
Real Betis , Alejandro Martínez, ha asumido hoy en rueda de prensa que "ganar mañana" al Morabanc Andorra "puede que no sirva para nada si lo hace también Zaragoza" en Manresa, lo que certificaría el descenso matemático del conjunto hispalense.
Sin embargo, y pese a que el equipo catalán, colista, lleva varias semanas descendido,
Martínez cree que existen "condicionantes en el Manresa-Zaragoza" que hacen que no "vea tan claro" que el triunfo de los aragoneses "sea sencillo" porque el farolillo rojo querrá "despedirse bien en el adiós de Montáñez". "Sigo teniendo ilusión. Si no, no habría venido. El calendario era complicado, la dificultad era importante. Los jugadores dieron un paso adelante, pero no fue suficiente para ganar esos partidos. El sábado, el equipo se entregó pero no hubo acierto", ha añadido el preparador barcelonés.
Alejandro Martínez ha perdido los cuatro partidos que ha dirigido al
Betis, pero ello no le ha impedido decir que sus jugadores "dan la cara" aunque deba "diferenciar entre competir y tener acierto", ya que, a veces, como "contra Barcelona y Obradoiro, los rivales fueron capaces de contrarrestar" el buen juego bético.
El técnico verdiblanco ha asegurado que su "vestuario cree todavía en el milagro", si bien es conscientes de Andorra y
Unicaja, los dos rivales que le quedan por afrontar "son superiores pero mañana" juegan "en casa y es la penúltima bala", por lo que "hay que salir a ganar". Martínez, que descartó al capitán, el esloveno Bostjan Nachbar, para los dos partidos que restan, ignora "si hay dos equipos peores que" el Betis en la
ACB, "es algo complicado de evaluar", pero ha manifestado que no es infrecuente la mala racha de resultados porque "no es la primera vez que un equipo se cae de este modo".