Más allá de que supusiese
una oportunidad de mercado, por acabar contrato en junio, el fichaje de
Munir El Haddadi por parte del Sevilla FC tiene una explicación deportiva, además de
una numérica, pues al técnico soriano le faltaba un atacante tras la salida de
Luis Muriel.
Seguramente, su sitio ideal sería por detrás del delantero en el 3-4-2-1 que comenzó utilizando Machín en Nervión. Es decir, para el puesto al que quiso a Portu, pero en el
3-3-2-2 el hispano-marroquí puede actuar tanto arriba, acompañado de otro punta, como en el sitio del 'Mudo' o Sarabia. No en vano, en San Mamés ocupó primero el sitio de Roque y, con la entrada de Bryan Gil acabó arriba, en una suerte de
4-3-3.
En el Barça, Valverde usó
también en la banda a un jugador que
maduró muchísimo en su cesión al Alavés, donde entendió que debía dejar de buscar la jugada 'maradoniana' (
'messiana', más bien) para tomar decisiones más vinculadas a lo que requiere el juego en cada momento. Munir
necesita libertad, para correr igualmente de adentro hacia afuera como de afuera hacia adentro.
Es interesante, sobre todo, para transitar rápido, porque se ofrece, la protege, tiene
un preciso pases largo (clave en la idea de Machín, para encontrar al carrilero libre del lado contrario) y visión de juego.
Ahora,
se para, mira, piensa y actúa, buscando al compañero más libre, al que inicia la carrera a la espalda de la defensa rival o
el disparo con su zurda, preciso desde media distancia. Y es que su pierna también
debe ofrecer mucho en las acciones a balón parado de un Sevilla que tiene ahí un tremendo déficit. A Munir se le da bien tanto ponerla como buscar el lanzamiento directo.
Lo mejor será que se mueva
por el perfil derecho, por donde Sarabia o Ben Yedder, porque desde ahí puede explotar su juego interior y disparo, gozando de una visión panorámica más amplia.
La idea, pese a todo, es que Munir aporte incluso más de lo que se le ha visto en Barcelona, Valencia y Vitoria, pues
llega en edad de explotar. A Machín le gusta y, por número de jugadores de ataque de la plantilla, va a tener minutos. Por coste y proyección, el riesgo de la operación es mínimo.
Pases largos y cambios de orientaciónEspecialista a balón paradoDisparo desde media distanciaDesmarques en transiciones y desborde con recursos técnicosRecepción, giro y pase en profundidad