Diego Rossi y Bruma llegan al Fenerbahce para reforzar el extremo izquierdo, mientras que Lincoln hará lo propio con la media punta. Pero Jorge Jesús ve flojo el eje de la medular, donde no cuenta con los otrora cedidos Gümüskaya, Max Meyer y Yüksek. Tampoco le hacen tilín Yandas, Tufan ni Zajc. Miguel Crespo y Can Kahveci sí le parecen muy válidos, como el pivote Luiz Gustavo, pero los dos últimos podrían salir este verano, al tiempo que cree necesario dotar a esa zona de experiencia y galones. Por eso, no ceja en su empeño de reclutar a William Carvalho, su pupilo en el Sporting Clube antes de que el Real Betis lo fichara por 16 millones de euros fijos y otros cuatro en objetivos. Lo intentó sin suerte durante su segunda etapa en el Benfica y, de momento, tampoco lo ha conseguido en Estambul.
Por si acaso, dejó los nombres de Willian Arao y Vinicius Souza, a los que conoce de su paso por el Flamengo, pero se trata de mediocampistas de cierre más defensivos. Con el primero, de hecho, las gestiones están muy adelantadas a cambio de unos tres millones de euros. Hasta se habló de Danilo Pereira, compañero y competidor del '14' heliopolitano en la selección portuguesa, aunque el PSG pagó 16 kilos por él el verano pasado y no lo soltará por menos. Desde Turquía no ven retroceso alguno en la operación de Arao, aunque varios medios coinciden en que el nuevo entrenador auriazul habría conseguido de los dirigentes del 'Fener', con Ali Koç a la cabeza, una última ofensiva por su gran deseo para potenciar la sala de máquinas, entendiendo, además, que se trata de una oportunidad de mercado evidente al concluir su vinculación dentro de un año.
Así las cosas, los de Kadiköy quieren trasladar al Betis en los próximos días una nueva propuesta por Carvalho, que sería la definitiva. O lo toman o lo dejan en La Palmera, donde se han iniciado los contactos con su agencia, Media Base Sports, con el fin de ampliar su contrato hasta 2024 al menos, ganando tiempo y margen de maniobra, si bien, por el momento, no ha habido avances en este sentido. William gana en la capital hispalense 2,5 millones de euros netos, siendo el segundo mejor pagado tras Fekir, quien, como Canales, Borja Iglesias o Álex Moreno, aceptaron ajustar un poco a la baja sus emolumentos a cambio de estar más años ligados a la entidad verdiblanca y, por ende, con ese seguro económico. Era la idea con el luso-angoleño, aunque, de no conseguirlo, lo ideal sería venderlo este verano, pues en Año Nuevo podría comprometerse gratuitamente y sin ocultarse con quien quisiera para la 23/24.
El Fenerbahce tendría que superar los 3,5 millones ofrecidos al Betis y los 2,5 más bonus sobre la mesa del mediocentro heliopolitano, que pedía más, aunque la realidad es que la SüperLig no le vuelve loco. De hecho, no ha querido moverse de Sevilla pese al interés recibido desde Turquía, la Championship y la Premier en las últimas ventanas, en gran medida por la confianza que depositó en él siempre Manuel Pellegrini, contrario en todo momento a su marcha. Y el rendimiento de William está ahí. El otro gran peso de la decisión es familiar. Aunque se fue su gran amigo Sidnei, la llegada de Willian José le ha venido genial, aunque hay que aclarar que su predicamento dentro del vestuario era y es grande. Aparte, hace dos años nació su primer hijo, Bryan, apostando por una crianza en una ciudad, la capital hispalense, que le encanta y en la que tanto él como su mujer se encuentran felices y adaptados. Hace unos días, la pareja anunció la llegada en pocos meses de su segundo vástago, también varón, una noticia que condicionará a buen seguro los próximos pasos que dé en su carrera deportiva, como hasta la fecha.