Diego Lainez lleva cuestionado, muy a su pesar, desde que aterrizó en el Betis tras las Navidades de 2020. Casi en cada ventana de transferencias, su nombre ha estado relacionado con muchos clubes interesados, primero, en su traspaso, que los verdiblancos se llevaron, adelantando a Lyon y Ajax, por 14 millones de euros por el 85% de sus derechos, y, después, por una cesión, con y sin opción de compra. La falta de oportunidades y/o de continuidad como heliopolitano han frsutrado los deseos del extremo de hacerse un nombre en Europa, aunque nunca ha exhibido un rendimiento digno de mantener esa confianza. Únicamente en la segunda vuelta de la campaña 20/21, cuando Manuel Pellegrini premió su buen derbi liguero con minutos de calidad en los siguientes partidos, se pudo atisbar a ese futbolista desequilibrante, con personalidad y con llegada que encandiló a los técnicos, con Serra Ferrer a la cabeza.
El caso es que el canterano de Club América se ha resistido hasta el momento a cambiar de aires. Mucho más a volver a tierras aztecas, insistiendo en sus aptitudes para cumplir con el desafío de triunfar en La Palmera. No le han terminado de salir las cosas a Lainez, que siempre tiene alternativas para acumular un minutos, una situación que puede y debe cambiar este verano. Sus allegados están tratando de convencerle para que transija y acepte un préstamo, ya que, con la llegada de Luiz Henrique, sus oportunidades seguramente se reducirán todavía más. Una docena de clubes de España y fuera han preguntado, aunque el Betis exige que, como quiera que termina contrato en 2024, renueve una campaña más como mínimo para que no se dé el escenario de una explosión de Diego y sólo seis meses por delante para que pueda comprometerse libre con cualquiera.
Mientras tanto, la aparición del Almería, un equipo amigo de los verdiblancos con el que ya se hicieron tratos anteriormente (Francis, Kaptoum, Fran Callejón), se antoja la solución perfecta para que el atacante juegue los minutos que se le están negando en el Benito Villamarín. Además, el técnico del recién ascendido, Rubi, conoce perfectamente a Lainez, lo que, unido al estilo protagónico, alegre y desenfadado de los rojiblancos, puede venir muy bien al mexicano. Así opina el 86% de los participantes en la encuesta propuesta por ESTADIO Deportivo, que entienden que, ante la cercanía del destino, el zurdo podrá sentirse importante y acumular la experiencia, el ritmo y el bagaje que le faltan para marcar una época en el Betis.