No vivió la despedida que le hubiera gustado, como dejó claro a la conclusión del Betis-Granada, pero Cristian Tello se lleva cinco años inolvidables, en los que ha podido cumplir con creces su sueño de vestir la camiseta de las trece barras. De hecho, a falta de que juegue o no ante el Real Madrid, lo ha hecho hasta en 171 ocasiones, el doble que en cualquier otro club. En Sevilla ha vivido los mejores años de su carrera, aunque aún le quedan sueños por cumplir.
Tras despedirse de todos los béticos con unas emotivas palabras en sus perfiles de redes sociales y mostrar su emoción ante las cámaras al final del último partido, Tello hacía balance en la televisión oficial del Betis a una temporada para el recuerdo y a cinco años que llevará siempre en su corazón.
Cinco años como verdiblanco"Son recuerdos muy bonitos que nunca se me van a olvidar. He vivido partidos muy emocionantes con esta camiseta y me los llevo para siempre. He tenido la oportunidad de encontrar aquí estabilidad tanto con el club como con mi familia. Antes pertenecía al Barça y estaba saliendo cedido a diferentes equipos, pero he tenido la suerte de poder estar aquí cinco años, de disfrutar este club y de esta familia; y me voy súper orgulloso y súper contento. (...) Son detalles muy bonitos que te hacen recordar una etapa y le reservaré un lugar en casa".
Su gol más especial con el Betis, en un derbi"El gol más especial ha sido el quinto gol en el campo del Sevilla -en el 3-5 de hace cuatro años-. Fue un gol muy bonito por las circunstancias del partido, por el equipo rival, que era como dar un golpe encima de la mesa en el campo del Sevilla y porque seguro que hizo feliz a mucha gente. Fue una carrera desde el centro del campo, a Sergio León ni lo vi, tenía bastante claro terminar la jugada y, por suerte, pudo salir bien y subir el quinto gol al marcador".
Cuando llegó ¿cómo imaginó que sería su camino en el Betis?"Vine al Betis con muchísimas expectativas de que club y el equipo creciesen. Estaba claro que estaba en una dinámica para lograrlo. Vinieron jugadores de muchísimo nivel y se veía que el club apostaba fuerte por el míster y por un grupo que tenía que hacer cosas importantes".
Sólo echó en falta tener más minutos"Sí, yo creo que cualquier jugador ambicioso lo que quiere son minutos y ser protagonista dentro del campo. Ha habido momentos en que tal vez podía haber participado más. Me voy también con ese pero de que me ha faltado esa continuidad y poder darle más al equipo dentro del campo".
Confianza de todos, pese a su rol de revulsivo"Tanto Quique como Rubi y Manuel han confiado en mí. Es verdad que por unas cosas u otras a lo mejor no se han decantado por mí para darme esa titularidad, pero he sentido su confianza y siempre que he salido he intentado dar lo mejor de mí. Es verdad que todos queremos salir de inicio y ser importantes, estar en ese rol de revulsivo es difícil para cualquiera porque la confianza se coge con minutos y con seguridad en el once".
En el Betis cumplió un sueño"Vine aquí con esa ilusión. Desde pequeño siempre he sido seguidor del Betis. Iba con mi padre cuando venían a Barcelona, tanto al campo del Espanyol como al del Barça, para verlos. A Sevilla vine también bastantes veces. Y cuando me dijeron de firmar aquí no me lo pensé y vine con muchísima ilusión".
¿Marca mucho este club y esta ciudad?"Sí, mucho. Tanto mi familia como yo hemos estado de lujo. No tenemos ningún pero. Va a ser una ciudad que vamos a llevar siempre en el recuerdo. Muy felices de haber vivido aquí y haber pertenecido a este club".
Toca decir adiós..."La verdad es que duele, son cinco años aquí, son muchísimos recuerdos con mi familia, con el equipo, con el club... Son momentos difíciles para la familia abandonar un lugar donde hemos estado tan bien, donde hemos creado una familia y todo lo que hemos vivido aquí. Cuesta dar el paso de dejarlo. Pero así es el fútbol. Estoy orgulloso de haber estado aquí cinco años, de haber cumplido el contrato y esperemos que los próximos retos vengan con mucha ilusión".
Un balance de la presente temporada"Contento por el año que hemos hecho. Es para estar orgullosos. Hemos ganado un título y volvemos a estar en Europa. Era el objetivo que se marcó el equipo al inicio y con el trabajo de todos, lo hemos conseguido".
Así vivió el penalti en la final de Copa"Con muchísimos nervios. Es un momento único. Está pendiente de ti muchísima gente. Los cinco que tiramos salíamos desde el banquillo. Es una situación difícil, pero por suerte pude engañar al portero. Durante la tanda estuve analizando un poco al portero para ver hacia dónde se tiraba y lo hizo en todos los lanzamientos para su derecha y tuve bastante claro abrirla a mi derecha".
¿Pidió lanzarlo o Pellegrini se lo dijo?"Yo tenía bastante claro que quería tirar, pero es una decisión del míster. Se acercó, me dijo que iba a ser el cuarto, que si estaba con confianza, le dije que sí, que sin problema, que yo lo tiraba. Había muchísimo en juego, mi intención era tirarlo fuerte a un lado para que si tienes la mala suerte de que te lo adivine el portero, al menos que no pueda llegar o que entre como sea".
La fiesta posterior, inolvidable"Al día siguiente fue inolvidable. Tanto después del partido con la celebración que tuvimos con familia y amigos como al día siguiente poder disfrutar de toda la ciudad saliendo a las calles con la camiseta del Betis. Es un orgullo y un recuerdo que voy a guardar siempre. Luego, cuando llegamos al estadio, con toda la gente, fue un día súper bonito, muy feliz de haber podido vivir días como este".
Acariciaron la Champions"A principios de temporada no era un objetivo, pero ha ido pasando el tiempo y ha sido una realidad. Hemos estado muchísimo tiempo en plazas de Champions y en el vestuario creíamos en ello. Sabíamos que esa posibilidad podía existir, que el equipo estaba bien, con confianza; y lo íbamos a intentar hasta el final. No ha podido ser por mala suerte, pero el año que viene seguro que el equipo lo sigue intentando y, con su crecimiento, se podría conseguir".
Dura despedida del Benito Villamarín"Son momentos difíciles, la última vez allí en el estadio... Vino mi mujer con las niñas y unos amigos. Son momentos de mucha emoción, sobre todo para mi mujer, da mucha pena que sea la última vez".
Ganar en el Bernabéu, la guinda"Sería una victoria muy bonita en un campo como el Bernabéu y, sobre todo, porque todavía nos estamos jugando esa quinta plaza que le da al club prestigio y una mejora económica, que siempre viene bien".
¿Por dónde pasa su futuro?"Todavía no lo sé, cuando acabemos el último partido en el Bernabéu, la semana próxima me sentaré con mi agente para ver qué opciones hay y decidiremos lo mejor para mi familia y para mí".
¿Qué va a hacer con su colección de coches?"Justamente mañana vienen ya a llevárselos, esta semana ha sido de mudanza y ajetreo, pero estarán bien en Barcelona también".
Y, ¿qué le dice a los aficionados?"Sobre todo darles las gracias. Desde que llegué me he sentido súper querido. He intentado dar lo mejor de mí dentro del campo, darlo todo por la afición. Llevo cinco años aquí y cada partido en el estadio ha sido una pasada, inolvidable. En el vestuario los necesitamos muchísimo. Ellos pueden ser uno más a la hora de apretar aquí en el estadio. Son fundamentales".