El
Real Betis tiene muy claro que el plan para convertir esta tendencia al alza de los dos últimos cursos en un
crecimiento sostenido pasa por mantener el bloque actual -"una
mezcla perfecta de jóvenes, maduros y veteranos", según Cordón- y reforzarse en las dos o tres posiciones en las que se han detectado carencias. A ello, muy a su pesar, tendrá que añadir al sustituto de
al menos una gran venta necesaria para cuadrar unas cuentas mermadas por la sucesión de crisis en todos los sectores de la sociedad mundial. En este sentido, es un secreto a voces que el jugador verdiblanco con más mercado a día de hoy es
Guido Rodríguez, por quien se esperan ofertas más que cuantiosas este verano. No obstante, según las opiniones recabadas por
ESTADIO Deportivo, el que más tranquilo está por una posible venta de un futbolista esencial en los esquemas de Manuel Pellegrini es el propio entrenador.
Según ha podido saber ED, cuando la dirección deportiva del Betis se ha puesto en contacto con el entrenador para conocer sus pensamientos acerca de un escenario no deseado pero probable con Guido Rodríguez,
Pellegrini se ha mostrado mucho menos inquieto de lo que cabría pensar y de lo que imaginaban algunos rectores del club. Confía plenamente en
Antonio Cordón (y viceversa), resulta tranquilizador que el club ya trabaje en posibles sustitutos de nivel,
como es el caso de Marc Roca y además
sigue teniendo claro que el de Paul Akouokou va a ser uno de los nombres importantes del cuadro heliopolitano en los próximos años.
El costamarfileño, cuya historia está plagada de obstáculos, lo jugó casi todo -y a un gran nivel- antes de un parón en el que se estrenó con la selección absoluta de su país. Participó en los dos partidos de los
'Elefantes Indomables', ante Francia e Inglaterra, dando así un
nuevo paso para acercarse a la senda de su ídolo de la infancia y espejo a seguir en su carrera.
Nacido hace 24 años, el 20 de diciembre de 1997, en la capital de Costa de Marfil, la historia de Edgar Paul Akouokou no se puede empezar a escribirse sin remontarse a
aquellas tardes corriendo por el asfalto dando patadas a un balón con los pies descalzos y jugando al fútbol junto a amigos con los que sigue teniendo relación a pesar de que
emigró a los 16 años para cumplir su sueño de ser futbolista profesional. Antes de llegar al Real Betis, el '4' verdiblanco jugó en su país, en el vecino
Burkina Faso, probó suerte en la fría
Finlandia, en
Francia o en
Israel. Siempre con la maleta preparada para viajar donde fuese necesario. Siempre con el afán de ayudar a su familia a escapar de tantas dificultades y sin perder de vista el espejo en el que quería mirarse: el de
"su ídolo, el ex de Barcelona o Manchester City e internacional marfileño Yaya Touré".Con motivo de su
debut con el Betis, la pasada temporada ante el Valladolid al entrar por William Carvalho,
ESTADIO Deportivo quiso acercar al beticismo la historia de Paul en tres capítulos que contaron con los testimonios de algunas de las personas más importantes en su aún incipiente carrera y de los que hoy este periódico recupera algunos estractos con motivos de su estreno con la selección absoluta de Costa de Martil en esta ventana FIFA para entender hasta qué punto ha sido importante lo que el centrocampista africano ha vivido estas dos semanas con su selección. Y nadie puede imaginar mejor sus sentimientos que las personas que le han acompañado desde aquellos primeros pasos en la
Académie Jaguar, en su Abiyán natal, antes de llevarle por media Europa convencidos de que tenía las cualidades -deportivas y, sobre todo, humanas- para cumplir su sueño de convertirse en futbolista profesional.
Paul
conoce a sus 'padres' futbolísticos siendo aún un cadete. Se trata de los señores
Ludovic Djé, exfutbolista y agente de jugadores con licencia de la federación francesa de fútbol que vive entre Costa de Marfil y Francia; y de
Herman Djé, empleado y reclutador de jóvenes promesas que vive también entre África y el país galo. "Paul empezó a jugar al fútbol desde muy joven, lo conocimos cuando buscábamos jugadores para equipos franceses en Abiyán (Costa de Marfil).
Lo que nos llamó la atención fue su gran calidad técnica, su capacidad para recuperar balones y su serenidad en el juego bajo presión", relataron a este periódico Ludovic y Herman Djé, que añadieron que, de niño, era muy fácil localizarle: "Si no estaba en la escuela, estaba en la calle jugando al fútbol".
De la mano de los Djé,
Paul probó suerte en el Majestic FC (Burkina Faso) antes de marcharse a Finlandia con sólo 16 años para jugar en el
Ekenäs IF. Allí empezó a demostrar su facilidad para asumir situaciones nuevas y adaptarse a ellas. En tierras nórdicas formó una
pequeña familia con otros jóvenes jugadores marfileños como Jems Geffrard, Boubacar Kinda, Cheick Camara y su gran amigo Mohamed Doumbia, casi un hermano para él, ya que se criaron en el mismo barrio y empezaron a jugar al fútbol juntos en su distrito de Yopougon, entrenados además por 'Tyson', el padre de Cheick. Estar juntos en esta aventura fue un gran apoyo para ambos.
Pero la carrera de Paul seguía.
Probó en Francia con el Angers, pero no salió bien.
En 2017 se marchó a la Primera división de Israel para jugar como cedido en el Beitar de Jerusalem, que tenía una opción de compra de sólo 80.000 euros que ahora lamentará no haber ejercido. Es más, apenas tuvo oportunidades y acabó saliendo de nuevo a préstamo
a un club de la segunda israelita, el Hapoel Ironi Rishon LeZion, donde por fin encontró continuidad.
2- Paul: Un espíritu de guerrero forjado en la adversidad
"Paul vive hoy el sueño que siempre quiso vivir: ser jugador profesional de un gran club de Europa", explicaron los Djé sobre una persona "muy familiar" y que ha adquirido una gran versatilidad en su corta y abrupta etapa de formación.
"Juega muy bien como 'centinela', él solo por delante de la defensa; pero igualmente es capaz de jugar un papel de creador de juego. En Israel jugaba de '8', tenía más llegada e incluso hacía goles. Hoy, cumple el papel de centrocampista trabajador, pero su modelo es la estrella del fútbol marfileño Yaya Touré. Francamente, es un jugador con un
potencial enorme, esperamos que logre demostrarlo en España. No le ponemos límites en su proyección, sólo le deseamos la misma carrera que tuvo su ídolo".
El triunfo de Paul es
"el triunfo de una familia humilde y muy necesitada, que apenas tenía para comer y que, aun así, permitió que su hijo Paul luchase por cumplir su sueño", afirmó a ESTADIO Deportivo otra de las fuentes consultadas, el exbético
Washington Tais, agente, persona de confianza y principal punto de apoyo del jugador bético, que recuerda que los inicios en La Palmera fueron de todo menos ilusionantes.
"Conocía el club pero venía casi a ciegas. No sabía que venía a jugar en Tercera. Al principio, estaba 'bajoneado', porque veía que no tiraba para arriba y hubo momentos que lo pasó muy mal. Además, hubo muchos problemas de papeleo para tramitar su ficha y se perdió media temporada". El siguiente escollo era convencer primero a José Juan Romero y luego a Quique Setién, entonces técnico del primer equipo.
"A José Juan le convenció desde el principio y siempre confió mucho en él", recuerda Tais, quien considera que el baile de nombres en el banquillo bético (el propio Setién, Rubi, Alexis y ahora Pellegrini) tampoco daba facilidades para su promoción. Más bien todo lo contrario.
"Quique le llamó alguna vez pero no pudo debutar, luego los cambios de entrenadores no le ayudaron. Además, en la temporada 19/20 iba a hacer la pretemporada con Rubi y tuvo que operarse de una fractura en una mano. Ahí estuvo mal, porque era el momento de dar el pasito y pensó que se escapaba la oportunidad definitivamente, pero siguió trabajando y confiando y el tiempo le ha acabado dando la razón", añadió Tais.
3-Paul: Los consejos de Pellegrini, un "merecido" presente y un ilusionante futuro"Tiene unas condiciones increíbles para jugar de pivote, mejor que de central (donde ocasionalmente jugó en el filial). Cuenta con una
capacidad de recuperación como he visto a pocos. Domina el juego aéreo, fuerte físicamente y con los pies va sobrado para esa posición. Considero que
será un futbolista fundamental, con proyección de elite. No tengo duda. Y como persona, es un chaval espectacular", manifestó a ESTADIO Deportivo
José Juan Romero, su entrenador en el Betis Deportivo, con el que sigue manteniendo contacto y que no tiene duda de que acabará siendo el mediocentro titular del Betis:
"Es el pivote ideal del fútbol de hoy en día. Ahora corresponde a él decir 'Aquí estoy yo', pero tiene potencial para eso y para más. Los fundamentos los tiene.
"Paul es un chaval en el que tengo mucha confianza, juega muy bien al fútbol, lleva una temporada y media muy complicada por lesiones, se quedó fuera de la lista para la Europa League porque no estaba al cien por cien, pero siempre que juega demuestra que
puede ser un jugador muy importante para el Betis", manifestó
Manuel Pellegrini después del último choque del Betis previo al parón, contra el Athletic, manteniendo que ve al africano siendo una pieza clave en sus esquemas. Por eso le convenció en enero de que no buscase una salida.
Le prometió que los minutos llegarían y han llegado. Ahora le toca al marfileño seguir empedrando este camino.