Desde el pasado verano y viendo las estrecheces económicas que vive y las dificultades que tiene para hacer fichajes, el
Barça de
Joan Laporta está 'tocando' a todo lo que se mueve para ver si suena la flauta y pueden reforzar un plantel que ahora vuelve a ser temible.
Así lograron el fichaje de
Aubameyang, que forzó para salir del
Arsenal y llegó gratis a Can Barça. Y así también lograron que
Ferran Torres saliese del
Manchester City, aunque ahí tuvieran la ayuda de Guardiola y Txiki Beguiristain, que permitieron que pagara el próximo año. Pero se han encontrado a otros muchos (
Tagliafico, Morata...) por los que han pedido una compensación, lógica, que no podían asumir.
El malestar generado en determinados clubes por tocar a sus jugadores no ha detenido al conjunto blaugrana, que ha seguido la misma táctica tras el mercado invernal. De hecho, su presidente, Joan Laporta, señalaba ayer que ya había cerrado a dos jugadores a coste cero. Se supone que son el milanista
Kessié y el central del Chelsea
Christensen. Pero más que de ellos se habla de los atacantes con los que está 'negociando' o, como poco, tanteando. Casos de
Raphinha (Leeds United), Salah (Liverpool), Lewandowski (Bayern)...
Liverpool y Bayern aún no han alzado la voz, pero el Leeds sí lo ha hecho, ha mostrado su enfado y ha dejado caer que va a pedir en torno a 50 millones por un jugador que está valorado en 45 y que aún tiene dos años más de contrato.
Pero no sólo busca delanteros, también jugadores en casi todas las posiciones. Le falta, como poco, un lateral diestro, un portero, uno o dos centrales, un lateral zurdo o dos si se va Jordi Alba... Y eso hace que, en esta posición, ya se estén concretando nombres. Algunos se antojan imposibles, salvo que fuercen ellos como Aubameyang y sus clubes acepten el 'chantaje', pero otros, de un perfil inferior, sí podrían entrar en el difícil puzle que tiene que hacer.
Para el puesto de lateral zurdo hay nombres de un valor sustancial como el ya deseado Tagliafico, Gayá, Zinchenko, Reguilón o Grimaldo, pero según la prensa catalana, también un
Alex Moreno que está cuajando una temporada de ensueño y que se encuentra entre los mejores en su puesto de España. El de San Sadurní de Noia ya pasó por el Barça en su etapa juvenil, pero no tuvieron mucha confianza en él y al año siguiente se marchó al Llagostera.
El lateral catalán
tiene aún tres años más de contrato con el Betis, que no daría facilidades a un equipo blaugrana que aún le debe dinero por Emerson y que no tendría muchas opciones para pagar.
Hay que tener en cuenta que el Barça es el único club con el límite salarial en negativo del fútbol profesional español y que los -144,353 millones que señala la última actualización de LaLiga le hacen casi inviable hacer movimientos salvo que se cierre el acuerdo con CVC, que la cúpula blaugrana quiere concluir antes de julio.
De momento, sólo puede gastar un 25% del dinero que libera y, con ese pasivo, es una situación que puede alargarse algún tiempo.