Uno de los atenuantes que puede ofrecer el Real Betis para que la sanción sea menor es la identificación de la persona que lanzó el palo que golpeó a Joan Jordán y que propición la suspensión del Real Betis-Sevilla FC de Copa del Rey.
En este caso es algo que se ha logrado rápidamente, en parte, gracias a la colaboración de la grada de Gol Sur del Benito Villamarín, que señaló a la persona que había cometido tal barbaridad. Incluso, se han llegado a ver imágenes en las redes de agresiones en esa zona del campo, que podrían ser contra el propio causante de esta suspensión.
El club verdiblanco ha filtrado que el agresor no sólo está identificado, sino que ha sido detenido por la policía. Incluso, ya habría imágenes del mismo o de alguien que se intuye que puede ser y que está rodeado por los agentes en el interior del estadio, si bien parece que se trata de una de las personas señaladas y a las que se tomó declaración.
"El Real Betis Balompié condena enérgicamente el lanzamiento de un objeto al terreno de juego durante el partido de la Copa del Rey. El Club ha colaborado de inmediato con la Policía Nacional para la identificación del presunto autor del lanzamiento, al que se le aplicaría con el máximo rigor el Reglamento disciplinario de la entidad. La intención del Real Betis Balompié ha sido en todo momento reanudar el partido y espera concluirlo lo antes posible", escribía el club en redes sociales.
La Policía Nacional había indicado que está trabajando en identificar a los autores de la agresión a Joan Jordán en el Betis-Sevilla, partido de los octavos de final de la Copa del Rey, un encuentro que ha sido detenido y suspendido por el árbitro Ricardo de Burgos Bengoetxea después de que una barra de plástico impactase en la cabeza del mencionado jugador sevillista.
El colegiado del encuentro estuvo dialogando con los delegados y entrenadores de ambos equipos durante más de diez minutos hasta que decidió detener el partido a los 40 minutos de la primera mitad. El técnico nervionense Julen Lopetegui no dejó de pedirle explicaciones.
De Burgos Bengoetxea envió a todos los futbolistas al vestuario a la espera de una decisión definitiva. El Betis, que tardó en aceptar la decisión, acabó también en la bocana. El partido se interrumpió con 1-1 en el marcador tras los goles del Papu Gómez y Nabil Fekir.