Lo
profesional suele separarse de lo
sentimental buscando, en teoría, una objetividad más realista. Sin embargo, es evidente que cuando se dan las circunstancias para que los dos aspectos se den la mano, la mezcla resultante es imparable, una especie de
pócima mágica elaborada en el caldero de Panoramix capaz de dotar de una
energía extra a quien le corre por el cuerpo y, lo que es aún mejor, resulta
altamente contagiosa para todos aquellos que le rodean. Por todo ello, el nombre propio de la victoria del
Real Betis ante el Celtic (4-3) en la Europa League es el de
Juan Miranda.
El de Olivares es un
bético de cuna, con un
fuerte arraigo por las trece barras y con un sentimiento inculcado en el seno familiar, desarrollado en sus años en la cantera del Betis y potenciado en esos años en los que le tocó vivir lejos de casa, teniendo que ver al equipo de sus amores por una televisión de Barcelona o Gelsenkirchen.
Miranda propaga su beticismo con todas sus fuerzas, aun sin ser consciente de hasta qué punto
abandera el amor por esa camiseta. Da igual si tiene que llevar el dorsal 33 y tener ficha del filial, no le importa tener que soportar molestias físicas.
Siempre lo da todo.
Ante el Celtic realizó un
ida y vuelta constante. Sufrió en defensa con los rápidas transiciones visitantes pero en acciones ofensivas estuvo sobresaliente:
un balón al palo, una gran pared con Fekir y una gran definición en el
gol que espoleó a sus compañeros, el 1-2, y una incesante
tromba de centros peligrosos haciendo oídos sordos a los síntomas de fatiga que emitía su cuerpo. En la reanudación, Álex Moreno llegó a vestirse por unas molestias de Miranda que, finalmente,
pidió seguir a Pellegrini, posponiendo una sustitución al descanso hasta el 70', cuando después de correr para frenar una contra se sentó en el suelo echándose la mano a la
parte posterior del muslo derecho.
Sobre esas molestias físicas que le forzaron a dejar el partido y ser sustituido en la segunda parte, el lateral izquierdo verdiblanco
le restó importancia y se puso desde ya a disposición del técnico para recibir el domingo al
RCD Espanyol: "Estoy bien. He salido
para prevenir, porque ahora vienen muchos partidos y antes de que uno se rompa hay que saber prevenir. El calendario está apretado, vienen muchos partidos e intentaremos
dar lo mejor y sacar siempre los tres puntos".
Por todo ello, resulta perfectamente lógico que Miranda haya sido elegido como el MVP del estreno continental, el
mejor jugador del Betis-Celtic, por una amplia mayoría de los participantes en la
#EncuestaHelvetiaED. Casi la mitad de los votantes (un 48 por ciento) se decantan por el internacional español, en un sondeo que también reconoce el gran partido realizado por
Borja Iglesias, que con un golazo de espuela y una generosa asistencia ha sido aclamado por un 25%, y por
Juanmi Jiménez, que firmó un doblete y se confirma como máximo goleador heliopolitano en este arranque de temporada. Nabil
Fekir, quien se topó con Joe Hart hasta en tres veces, cierra con un considerable 6 por ciento.
"El partido se nos puso muy difícil, pero hay algo que el equipo tiene muy claro: cree a pesar de las dificultades.
Ese alma y ese corazón nos da mucho. Hoy se ha puesto difícil, pero hemos reaccionado pronto y con el 2-2 al descanso hemos podido afrontar una segunda parte con el partido igualado", argumentó
Borja Iglesias al término del choque. Su manera de celebrar la asistencia a Juanmi, totalmente eufórica, también sirvió de
combustible para encender a la grada del Benito Villamarín y hacer confiar a todos en que el triunfo era posible: "Es normal que en los primeros minutos no estuviesen contentos. Nadie lo estaba, pero nos han dado ese aliento para remontar".
En la misma línea se expresaba el bigoleador malagueño: "No hemos entrado con esa intensidad necesaria y en Europa cualquier equipo, y más uno grande como el Celtic, te crea peligro. Con el 0-2 hemos sabido reaccionar y
empatar antes del descanso ha sido muy importante". En lo personal, celebró dos goles más y ya suma cuatro dianas, contando las dos conseguidas en LaLiga ante Cádiz y Mallorca, aunque esta última no se la cuente la competición. "Para la gente que jugamos arriba
siempre es vital hacer goles. Te da
autoestima. Estoy trabajando bien y
tengo esa continuidad necesaria", festejó Juanmi.