Sidnei, un quebradero de cabeza para Cordón

Primero fue el Inter de Porto Alegre, luego el Trabzonspor, ahora el Aris... Al menos esos tres clubes han llamado a la puerta de Sidnei este verano sin mucha fortuna. Los primeros se encontraron con unas pretensiones económicas inviables para la economía de Brasil, o al menos esa fue la excusa que señalaron. Y eso que se trataba el club en el que creció y en el que podría acabar retirándose. El Trabzonspor turco se encontró con la negativa del jugador. Y ahora, el Aris de Salónica, según aseguran desde Grecia, no puede alcanzar el sueldo que supuestamente solicita el central bético.
Pellegrini fue muy claro con Sidnei desde el principio. En julio, cuando arrancó la pretemporada, habló con él y le explicó el rol que iba a tener si se quedaba para cumplir el año que le resta de contrato. Iba a ser el último de la fila, por detrás, incluso, de Edgar, que venía como mediocentro. Y tanto Víctor Ruiz, como Bartra como los fichajes que llegase -en este caso, Pezzella- estarían por delante.
Básicamente, le estaba empujando a que buscara una salida. Su sueldo, en principio, estaba destinado a liberar masa salarial y aportar, si fuera necesario, en alguna contratación. Pero estamos a una semana de que se cierre el mercado y Sidnei no sólo sigue aquí sino que las pocas propuestas que ya le llegan las rechaza.
Según la prensa griega, la propuesta del Aris era por dos años a 700.000 euros por temporada, una ficha sensiblemente inferior a la que cobra en el Betis y que motiva su negativa a salir perdiendo dinero.
El jugador parece abocado a quedarse aquí y, ya libre, firmar en junio de 2022 al mejor postor. O a otro tipo de acuerdo, con el Betis por medio, en el que él no pierda lo que ya tiene firmado.
Pellegrini fue muy claro con Sidnei desde el principio. En julio, cuando arrancó la pretemporada, habló con él y le explicó el rol que iba a tener si se quedaba para cumplir el año que le resta de contrato. Iba a ser el último de la fila, por detrás, incluso, de Edgar, que venía como mediocentro. Y tanto Víctor Ruiz, como Bartra como los fichajes que llegase -en este caso, Pezzella- estarían por delante.
Básicamente, le estaba empujando a que buscara una salida. Su sueldo, en principio, estaba destinado a liberar masa salarial y aportar, si fuera necesario, en alguna contratación. Pero estamos a una semana de que se cierre el mercado y Sidnei no sólo sigue aquí sino que las pocas propuestas que ya le llegan las rechaza.
Según la prensa griega, la propuesta del Aris era por dos años a 700.000 euros por temporada, una ficha sensiblemente inferior a la que cobra en el Betis y que motiva su negativa a salir perdiendo dinero.
El jugador parece abocado a quedarse aquí y, ya libre, firmar en junio de 2022 al mejor postor. O a otro tipo de acuerdo, con el Betis por medio, en el que él no pierda lo que ya tiene firmado.