El
Betis anunció el pasado mes de octubre la rescisión del contrato de
Francis Guerrero, después de que la temporada pasada militara durante la segunda mitad del curso cedido en el Almería. La situación económica del club verdiblanco como consecuencia del coronavirus y la complicada situación física del lateral derecho empujaron a la entidad verdiblanca a rescindir el contrato de un canterano con el que no se contaba para este curso, con Manuel Pellegrini al frente del vestuario.
La decisión, como se conoció luego, fue tomada
de manera unilateral por parte del Betis, lo que llevó al futbolista a denunciar al conjunto verdiblanco en los juzgados. El joven lateral, quien llegara a jugar 43 partidos con el primer equipo del
Real Betis Balompié, tenía una rodilla en unas condiciones muy delicadas pese a sus 24 años, no habiéndole funcionado los tratamientos conservadores que se le habían aplicado hasta ese momento. Necesitaba pasar por el quirófano y
someterse a una delicada intervención de la que ahora sigue recuperándose, trabajando con un recuperador privado en Málaga.Tras no llegar a ningún tipo de acuerdo entre las partes, el
Betis optó por darle la carta de libertad, viéndose ahora en los juzgados. Un encuentro que, como ha podido conocer
ESTADIO Deportivo, se producirá en principio el próximo mes de junio.
Francis, para rescindir, proponía al
Betis recibir la carta de libertad con una rebaja de lo que debía percibir por su contrato, después de que la dirección deportiva del Betis lo renovara hasta 2023 en febrero de 2019. El club, por su parte, pretendía que el futbolista se acogiera a la invalidez por sus problemas de rodilla, los cuales eran suficientemente graves como para ello. Aceptar eso, lógicamente, suponía poner fin a su carrera como profesional, haciéndose el seguro cargo de sus emolumentos.
Esa opción no pasaba por su cabeza, quien tiene fijado en su cabeza poder llegar para el inicio de la próxima temporada. Antes de eso, en junio, la justicia española tendrá que dictaminar cómo se resuelve el litigio abierto entre las partes.
Francis llegó al
Betis en 2014 en categoría juvenil y ascendió al primer equipo de la mano de Quique Setién. La pasada temporada la acabó cedido en el Almería, donde disponían de una obligación de compra por el jugador si conseguían el ascenso, algo que finalmente no sucedió.