Un año de soledad, aunque se nos han hecho cien.Este lunes, 8 de marzo, se cumple exactamente un año desde el último partido con público en LaLiga. Fue en el Benito Villamarín y el gol de Cristian Tello para poner el definitivo 2-1 para el Real Betis contra todo un Real Madrid sería el último que resonaría en los estadios de la Primera división española. La casualidad ha querido que el equipo verdiblanco juegue exactamente 365 días después en su casa, esta vez ante el Deportivo Alavés, y con silencio total. Sin balas de cañón.
"Nos lo intentamos tomar de la mejor manera posible, pero todo es muy serio y aburrido. No podemos hacer una comida de equipo porque tenemos que estar en mesas de seis, no podemos desayunar juntos como se hacía antes... Y luego la ausencia del apoyo de nuestra gente. Lo notamos por redes, cuando salimos del hotel... pero no es lo mismo. Esa sensación de salir al campo con 55.000 locos gritando... Ahora sales al campo con todo en silencio, con cuatro suplentes aplaudiendo... (Resopla) Si lo tengo que definir en una palabra, ésa es 'mierda'. Esto es una mierda. Y mientras la gente no se lo tome en serio, vamos a seguir así y me molesta mucho, porque no podemos disfrutar de un partido en paz", explicaba el futbolista del Betis Aitor Ruibal en una entrevista reciente para ESTADIO.
El eco de los estadios es una mierda. Es el sentir de Ruibal, de todo el Betis, de todos los béticos y de todo aficionado al fútbol. Esto, sin las hinchadas, no es lo mismo. Aunque desde semanas antes ya se hablaba del coronavirus y de su foco inicial en Wuhan (China), y que especialmente en Italia empezaba a causar estragos, nadie albergaba en sus previsiones que ese domingo 8 de marzo del pasado año tendría lugar el último partido de LaLiga que se disputaría con público. Dos días después de ese Betis-Real Madrid con 50.596 personas en las gradas, el martes 10 de marzo, se disputó en Ipurúa el aplazado Eibar-Real Sociedad, ya a puerta cerrada. Para la siguiente jornada estaba decretado el Estado de Alarma y el confinamiento total de la población y el fútbol no volvió hasta junio, con un derbi sevillano en Nervión deslucido por las gradas vacías.
ESTADIO puedes recordar ese último gol cantado, el de Tello; puedes volver a sentir esa última piña con las personas de las butacas de al lado; evocar una de nuestras mayores pasiones. Podrás mantener vivo ese recuerdo desde la emotiva añoranza de los que ya no están, pero también desde el deseo y la esperanza de que pronto nos podamos dar abrazos de gol.