La última vez que el Betis visitó El Alcoraz fue también por estas fechas. En aquella ocasión, un 5 de enero con las cabalgatas de Reyes en la calle, una remontada local dejó tocado a Setién en su segundo año (y final) como técnico verdiblanco. Dos más tarde casi exactos, los de Pellegrini comparecen en Huesca con similares condiciones meteorológicas y una necesidad idéntica de crédito.
Olvidar aquella derrota, la única frente a los azulgranas en los seis enfrentamientos entre ambos en la elite, se antoja crucial para que las aspiraciones béticas casen de una maldita vez con las expectativas. Ni siquiera la pléyade de bajas ni los estragos de Filomena justificarían un tropiezo ante el colista de Primera, cuyo técnico sí que se la juega, para lo que medita cambiar de sistema (del 1-4-3-3 o 1-4-2-3-1 habituales al 1-5-3-2) a la espera de aclarar su convocatoria.
Y eso que a los heliopolitanos les costará un mundo llegar a la ciudad altoaragonesa por los cortes de carreteras y vías ferroviarias por culpa de la nieve. El temporal dará una ligera tregua este lunes, si bien el frío arreciará durante toda la semana, con temperaturas de entre -7º y -10º a la hora del partido.
La buena imagen en el derbi, donde faltó más acierto (por ejemplo, de Fekir desde los once metros) para materializarlo en una victoria, necesita un refrendo palpable esta jornada, cuando el teórico aspirante persigue salir de la zona intrascendente de la tabla, la templada, para hacerse un hueco en la caliente, donde se reparten los billetes europeos.
No la caliente de la quema, de la que todos, especialmente los menos duchos, huyen como pueden. Ahí abajo, en realidad, hace un frío que pela, tremendamente lejos de la gloria y de la repercusión mediática. Así que toca redoblar esfuerzos, contagiarse del fuego de Canales (un profesional digno de imitación y elogio), de las brasas que comienzan a levantar chispas en Lainez y Loren. El ansiado deshielo ya está tardando.
Llegará el Betis, como se ha dicho, sin nueve hombres, muchos de ellos fundamentales. Sobre todo, Guido Rodríguez, faro y ancla en la medular, que cumplirá ciclo de amonestaciones, uniéndose a las lesiones de Camarasa, Dani Martín, Tello, Bartra y William Carvalho, así como a los contagios de Montoya, Joaquín y Guardado, presas de un coronavirus que ha liberado sobre la bocina a Álex Moreno.
Todo ello propiciará, casi con total seguridad, el estreno como titular en LaLiga de Paul Akoukou, que ya adquirió rodaje en Copa, acompañado por Canales, que reposó el miércoles, en la sala de máquinas. Atrás, Emerson, Mandi, Víctor Ruiz y Miranda, salvo sorpresa, escoltarán a Bravo, mientras que Lainez, Fekir y Aitor Ruibal se antojan con plaza fija en la media punta, salvo que Pellegrini quiera seguir dando galones a Rodri y alterar un poco más la alineación que opuso al eterno rival. En punta, Loren debe repetir, tras no tener minutos en Mutilva.
Alineaciones probables:
Huesca: Álvaro Fernández; Pedro López, Pablo Insua, Siovas, Javi Galán; Mikel Rico, Mosquera; Ferreiro, Borja García u Okazaki, Ontiveros; y Rafa Mir.
Real Betis: Bravo; Emerson, Mandi, Víctor Ruiz, Miranda; Paul, Canales; Aitor Ruibal, Fekir, Lainez; y Loren.
Óscar Murillo4 min lectura