"Hemos estructurado una
plantilla de acuerdo a la realidad económica del club. Con la dirección deportiva trajimos refuerzos que nos van a complementar. Aquí la clave es el
espíritu de equipo y al final de temporada a ver dónde podemos llegar".
Manuel Pellegrini no pide por pedir. Es perfectamente consciente de la situación y desde el principio adapta su discurso a sacar el máximo rendimiento a este grupo de jugadores, sin pararse a pensar cómo sería con los
dos o tres refuerzos más que todos en el club admiten que habrían necesitado para reforzarse de verdad.
De los cinco fichajes,
sólo Claudio Bravo (270') llegó con la vitola de
titular. Quiere tener enchufada a la plantilla al completo y, de hecho, en estas
seis jornadas ya ha utilizado a 23 jugadores diferentes; el último de ellos fue
Juan
Miranda, el pasado domingo contra la Real Sociedad. Por eso resulta aún más
sorprendente el caso de Víctor Ruiz. El central catalán es el
único jugador de campo con ficha del primer equipo que no ha disputado aún
ni un solo minuto de juego estando apto.
Andrés
Guardado apenas suma unos segundos que salió en Mestalla tras recuperarse de unos problemas musculares y los canteranos
Fran Delgado y Dani Rebollo tampoco han debutado pese a haber entrado en las seis listas; pero en sus casos tienen ficha del filial. Los lesionados de larga duración Víctor
Camarasa y el portero
Dani Martín son los otros dos que no han participado, por motivos obvios.
Martín
Montoya, pese a llevar varias semanas aislado por protocolo sanitario, ha jugado 22' y Juan Miranda jugó los últimos 15' el domingo. Los retornados Tonny
Sanabria (290') y
Aitor Ruibal (144') también tienen protagonismo e incluso el promocionado
Paul Akouokou ha podido participar en dos de los seis encuentros ligueros (30' entre ambos).
Juanmi, Diego Lainez, Loren... los hay que han jugado poco; pero el central barcelonés es el único que futbolista que no ha debutado hasta ahora.
La situación de Víctor Ruiz es curiosa porque se trata de un jugador que
llegaba para reforzar una posición muy señalada el curso pasado. Llegaba para suplir el hueco dejado por el traspasado Feddal, pero en teoría lo hacía para competir con
Mandi y Bartra por un puesto de titular y por delante de
Sidnei a priori. Sin embargo, ni la sanción del argelino le ha servido para debutar, ya que el brasileño ha sido el central elegido de Pellegrini ante Valencia y Real.
"El rendimiento de los tres centrales que han jugado ha sido alto salvo en el partido con el Getafe. Sidnei suplió muy bien en Valencia a Mandi y
Víctor Ruiz tiene que esperar y seguir trabajando como lo está haciendo", señaló el entrenador verdiblanco el pasado viernes, al ser preguntado al respecto en la rueda de prensa previa al choque ante los donostiarras, que volvieron a poner de manifiesto que a la
supuesta mejoría defensiva del Betis le hace falta
varias manos de pintura más.
La etapa de Víctor Ruiz en Heliópolis
ya comenzó torcida desde su llegada hace tres meses, aunque Pellegrini y el director deportivo,
Antonio Cordón, siempre han avalado su contratación y puesto en valor su la experiencia que puede aportar. Y es que su decisión de romper de manera unilateral el año de contrato que aún le restaba con el
Besiktas, ante la negativa del club otomano de negociar su traspaso al Betis, le costó una
denuncia en la que los estambulitas le demandan una compensación de
dos millones de euros y
se niegan a tramitar su ficha federativa.
Para colmo de males, a la imposibilidad de ser inscrito en LaLiga, hasta que a finales de septiembre recibió una
autorización provisional de la FIFA a la espera del juicio con el Besiktas, se sumaron unas
inoportunas molestias musculares propias de las primeras semanas de trabajo tras la pretemporada y se quedó
fuera de la lista para el estreno en Vitoria ante el Alavés. En las cinco jornadas siguientes ha entrado siempre en la convocatoria, pero Pellegrini no le ve de momento ni para salir de inicio, ni para entrar como refresco. Es curioso.