Con poco más de
tres días de margen, Antonio
Cordón trabaja a contrarreloj para contentar a Manuel
Pellegrini con la llegada de un lateral izquierdo que complete la planificación, donde solamente ese puesto no está doblado, dotando de competencia a un
Álex Moreno que no ha respondido a las expectativas en este 2020. Las estrecheces económicas han impedido esa cuarta incorporación en un Betis que ha reclutado a coste cero al meta
Bravo, el lateral diestro
Montoya y el central
Víctor Ruiz, pero que promocionó al extremo
Aitor Ruibal y al pivote
Paul ante la imposibilidad de contratar efectivos de fuera para esas demarcaciones.
Además, la firme intención de no
malvender a sus mejores jugadores, así como la ausencia de ofertas reseñables, forzaron la continuidad de los que estaban en el escaparate a principios de verano (
Mandi, William Carvalho, Loren y Sanabria), al tiempo que se logró retener a
Emerson pese al interés del
Barcelona de incluirlo en alguna operación. A estas alturas, con el 'deadline' de la ventana estival-otoñal a la vuelta de la esquina, el gran problema sigue siendo el
tope salarial de LaLiga, que, de no conceder un aumento especial en las próximas horas, impediría cualquier entrada de no producirse salidas antes del
lunes a las 23:59 horas.
Lainez, que podría liberar una ficha reseñable, ha decidido quedarse y no aceptar una de las cuatro
ofertas de préstamo que manejaba de equipos de Primera división (
Cádiz, Huesca, Levante y Eibar), con lo que cierra la mejor puerta de que disponían los técnicos verdiblancos, que sí pueden hacer hueco con dos que no tienen dorsal, el carrilero
Francis (que podría rescindir) y el mediocentro
Kaptoum (que se marcharía cedido). La venta al
Atlético de Madrid de
Ismael, que rompería el segundo año de cesión en el
Alavés, reportará dos millones de euros, más una cantidad inferior por objetivos, de la que ahora se ingresaría la mitad.
No obstante, esta última operación otorgaría fondos, pero sin achicar la masa salarial, el verdadero problema en la planta noble del Benito Villamarín (donde se podrían utilizar 2-3 millones de euros de otras partidas para fichar, aunque no valdría para poder
inscribir al elegido). Por eso, salvo giro inesperado de los acontecimientos, no se podrá acometer la contratación del deseado lateral zurdo, con
Jonathan Silva (Leganés) como gran favorito. Con todo, al Betis no le llega para alcanzar los
tres millones de euros que exigen los pepineros por el italo-argentino, descartando por ahora la
cesión con opción de compra solicitada desde Heliópolis.
Se trata de la misma fórmula en la que podría encajar el fichaje del último nombre en saltar a la palestra, Diego
Laxalt. A sus
27 años, el uruguayo lleva siete en Italia, contando con
pasaporte de aquel país y, por tanto, no ocuparía plaza
extracomunitaria (que no hay libres en el Betis). La cuestión es que el
Milan, que pagó por él casi 15 millones de euros al
Genoa y que lo prestó en el pasado mercado invernal al
Torino, desea recuperar, al menos, la mitad de aquella inversión. Desde La Palmera han propuesto la citada cesión con opción de compra, si bien
Olympiacos y Sporting Clube están a la expectativa.
En la tarde de este
viernes, según recoge la información de 'Calciomercato.com', el agente de Laxalt,
Vincent Casella, llegaba a las instalaciones del club lombardo para entrevistarse con su director deportivo, Paolo
Maldini, con el fin de estudiar la mejor opción de
salida. En estos momentos, no parece factible que el charrúa desembarque en Heliópolis, aunque las últimas horas de mercado prometen ser intensas en los despachos del Villamarín, donde se va a intentar completar la
planificación.