Raúl Guti ya tiene equipo en Primera, pero Aleñá vuelve a estar 'disponible'

Aunque la gran prioridad, a día de hoy, es encontrar un lateral izquierdo que compita con Álex Moreno, pues se trata del único puesto que no está doblado en la actual plantilla, la idea original de Antonio Cordón tenía como objetivo reforzar otras posiciones en un Betis que podría reactivar ese plan inicial en el tramo final de mercado si se concretan las ventas de Loren y/o Sanabria.

Así, surge la posibilidad de apuntalar, al margen de la delantera, si se concretan dichos traspasos, el juego por bandas, con un extremo polivalente que aporte desborde, y un centro del campo para el que se busca un mediocentro creativo, posición algo huérfana desde la marcha de Aleñá. Para ello, uno de los nombres que llevaban tiempo en la agenda es el de Raúl Guti. Pero la falta de ‘cash’ ha impedido concretar ese interés en una oferta concreta y dicha opción ya se ha esfumado.

Semanas atrás se daba por hecho que el centrocampista lo tenía todo acordado con el Almería, pero su gran deseo era dar el salto a Primera división, tras destacar estas últimas campañas en las filas del Zaragoza, y esperaba que algunos de sus pretendientes movieran ficha. Lo vigilaban de cerca, además del Betis, el Valencia, el Levante o en Eibar que llegó a ofrecer 2,5 millones, muy lejos de los 10 kilos de su cláusula de rescisión, que se habría doblado en caso de ascenso del conjunto maño.

La intención del Zaragoza era recaudar al menos la mitad de dicha cantidad. Y a ello estaba dispuesto a llegar el Almería, que ofrecía 4,5 millones más 1,5 en variables. Pero a última hora, Raúl Guti se ha decidido por el Elche, que pagará 5 kilos por su traspaso, guardándose el club aragonés el 20% de la plusvalía en un futuro traspaso. El deseo del jugador de dar el salto a la máxima categoría le ha llevado a pedirle a su ya ex equipo que acepte dicha propuesta, firmando un contrato de cuatro temporadas con un sueldo incluso inferior al que le ofrecía el Almería. Un tren que se le escapa al Betis por la falta de esa necesaria inyección económica.

Sin embargo, al mismo tiempo que se cierra una puerta, otras se abren. Este puede ser el caso del propio Carles Aleñá, que regresó al Barcelona con la ilusión de triunfar como azulgrana pero se ha topado con la posición contraria de Koeman, que le ha abierto la puerta de salida tanto a él como a otros jóvenes que gustan en el Betis: Riqui Puig y Pedri. Todos ellos podrían salir cedidos y en Heliópolis, a buen seguro, no perderán de vista esta económica posibilidad de reforzarse, más aún dadas las buenas relaciones con el Barça. No sería descabellado, por tanto, que el sustituto de Aleñá sea… el propio Aleñá.