El Betis firmó un empate en Balaídos que le sabe a poco porque hizo méritos para lograr el triunfo en un segundo tiempo donde superó a los vigueses y el árbitro le escamoteó un penalti clarísimo sobre Guardado. Se adelantaron los vigueses en una falta lanzada por Nolito en la que Joel pudo hacer más.
No se vino abajo el Betis, acostumbrado a jugar con el viento en contra, y neutralizó la ventaja con un tanto de Feddal que fue revisado durante un largo rato por el VAR, si bien finalmente se dio por válido.