Lleva meses siguiendo el Betis a Raúl Guti (23), joven mediocentro del
Zaragoza que ha confirmado esta temporada todo lo bueno que apuntaba, ganando madurez en la toma de decisiones, frescura mental y carácter sobre el terreno de juego.
El canterano maño está siendo
uno de los pilares de la escuadra dirigida por Víctor Fernández, que olía a Primera división cuando se interrumpió la temporada 19/20 por la crisis del coronavirus. Y ése es el
principal temor en Heliópolis, pues
un hipotético salto de categoría elevaría el precio de salida del completo centrocampista, que tiene actualmente
contrato hasta 2023 con los blanquillos y una
cláusula de rescisión de 10 millones que se dobla en caso de ascenso.
Según avanza ‘Abc’,
el entendimiento entre Betis y Zaragoza convertiría la operación e factible de mantenerse los aragoneses en Segunda, incluso por menos de esa decena de kilos, pero, de continuar su escalada los de La Romareda, estarían tentados de quedárselo para sustentar un nuevo proyecto en la elite o bien pedirían más dinero por un futbolista al que también sigue el Valencia.
Aquí, pese al fichaje de
Guido Rodríguez y la irrupción de
Edgar, Raúl Guti tendría sitio, pues no está clara la continuidad de
William Carvalho ni de, incluso, el renovado
Guardado, mientras que
Aleñá se marchará, por lo que
Canales busca nuevos socios en la zona más creativa de la parcela ancha.
El maño es un jugador de bastante recorrido, de ida y vuelta, pero también con criterio y calidad.
Un efectivo joven y completo que encaja perfectamente en la economía de guerra que se avecina. Quedan los últimos pasos, pero todo depende del Zaragoza.