Continúa siendo el inviable, como se recogía la semana pasada en estas mismas páginas, el fichaje de
Mariano Díaz por el
Betis, que realizó un nuevo sondeo a mediados de julio, una vez constatado que el
Espanyol no cedía en sus pretensiones por
Borja Iglesias.
En ese momento, una situación que no ha variado un ápice por el momento, la operación fue descartada por razones fundamentalmente económicas, pero también deportivas.
De esta forma, el hispano-dominicano volvió del
Olympique Lyonnais con un sueldo de
cuatro millones de euros netos que le respetaron en el Real Madrid, donde apenas tuvo oportunidades en la 18/19 con
Lopetegui,
Solari ni
Zidane.
Ahora, con el fichaje de
Jovic, los merengues escuchan ofertas siempre y cuando le generen una plusvalía -abonaron
23,5 millones de euros por recuperarle hace ahora un año- y puedan incluir una
opción de recompra no muy alta. Por ende, por menos de 25-30 kilos no saldría
Mariano, aunque el principal interesado, a día de hoy, no quiere irse.
Llegado el caso, el delantero podría cambiar de opinión, si bien eso no ocurrirá, a priori, antes de la última quincena de agosto. El
Betis no puede esperar tanto ni, visto el ejemplo del último mercado invernal, arriesgarse a quedarse compuesto y sin 'novia'.
Aparte, pese a que no se ha revalorizado, a las puertas de
Mariano han llamado clubes más pudientes, la mayoría en competición europea. Por tanto, reunir de nuevo al de Premià y a
Fekir en Heliópolis se antoja una quimera.