La actividad en la planta noble del
Benito Villamarín es frenética desde hace días.
Lorenzo Serra Ferrer y su equipo llevan tiempo peinando el mercado en busca del 'killer' que remate una buena plantilla como la verdiblanca, aunque el objetivo es mejorar lo que hay con un delantero que conozca
LaLiga y/o el
idioma, por lo que habrá que hilar fino, lo que suele traducirse en un mayor tiempo de espera para aprovechar las oportunidades que surjan a finales de enero.
Además, y aunque el jefe de la planificación heliopolitana no cuenta en principio con una partida presupuestaria boyante ni da por seguro algún ingreso extraordinario derivado de la
'operación salida', tratará de que la obligada vigilia en pos de
una 'ganga' de última hora para la vanguardia le sirva para definir un plan de actuación en la ventana invernal que incluye, además del punta (prioritario), la búsqueda de un carrilero polivalente, como se avanzó en estas mismas páginas.
Encima, los movimientos en torno a varios futbolistas que pertenecen a la disciplina bética invitan a pensar que el pesimismo en lo que se refiere a recaudar en este apartado puede deparar sorpresas positivas. Por ello,
Serra prefiere aguardar al recuento antes de decidir, por ejemplo, si espera a
Munir para firmarlo libre en verano (tratando de adelantar un acuerdo, como con
Pau López,
Canales,
Inui y
Joel) o se lo compra ahora al
Barcelona, que no puede renovarlo, a un precio menor que su valor de mercado.
Ayudaría, lógicamente, que
las intenciones del Cardiff se materializaran en una oferta por Camarasa, cedido allí y brillando en la
Premier League. Los 15 millones de euros que, según se ha publicado esta semana, ofrecerían los galeses dispararían las posibilidades verdiblancas de firmar en enero, tanto a un ariete de garantías como al deseado carrilero versátil.
En principio,
Inui seguirá, pese a su ostracismo, por petición expresa de
Setién.
Sanabria no está abierto a marcharse a mitad de curso, salvo oferta irrechazable, mientras que en
Francia dicen que Haro pide 14 kilos por
Boudebouz, que sí podría liberar, de ser cedido, una ficha alta.