El Betis se reconcilia con su estadio

El Betis llegó al último parón liguero por los compromisos internacionales tras una histórica victoria en el Camp Nou, pero con un paupérrimo bagaje en su estadio. Hasta esa fecha, los verdiblancos apenas habían ganado dos encuentros en Liga, el derbi ante el Sevilla en la tercera jornada y el encuentro ante el Leganés por la mínima, y el de Europa League ante el modesto Dudelange.

Se le presentaba a los verdiblancos con la reanudación de la competición una oportunidad pintiparada para congraciarse con su parroquia, que andaba huérfana de alegrías, pues, desplazamiento a Villarreal al margen, el calendario le tenía deparado cuatro encuentros consecutivos al calor de los suyos, encuentros que ha saldado el equipo de Setién con cuatro triunfos importantísimos.

Ganó el primero de los cuatro ante el Olympiacos en la Europa League con el que certificó su pase a los octavos de final de la competición una jornada antes de finalizar la Fase de Grupos. Ya en Liga recibió a una Real Sociedad a la que se impuso por la mínima (1-0), un triunfo que le sirvió para comenzar una escalada en la tabla que obtuvo un nuevo impulso anoche tras superar al Rayo por 2-0.

Entre medias de esos dos encuentros, el Betis goleó al Racing en la vuelta de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey, sellando su pase a la siguiente fase del torneo del K.O. Cuatro triunfos que le reconcilian con su gente.